Ofreció ayer concierto en San Cristóbal de las Casas

Mi música es un mestizaje entre lo antiguo y lo mexicano: Jaramar

JAVIER MOLINA CORRESPONSAL

San Cristobal de Las Casas, Chis., 29 de julio. Cuando se habla de música antigua, a lo que se está haciendo referencia es a la música medieval y renacentista europea. Ese es el punto de partida en mi búsqueda, afirma Jaramar (Jaramar Soto), quien nació el 3 de agosto de 1954 en México, D.F. y vive en Guadalajara desde hace 25 años. "Me inicié en la música estudiando danza -platica-, como parte de mi formación como bailarina, y mi abuela fue mi primera maestra de canto. Más adelante tuve más maestros, pero mi formación en la música la logré a lo largo de mi vida, al escucharla desde muy pequeña, y en la búsqueda de un vehículo de expresión que me fuera propio. Lo descrubrí ya siendo cantante, al entrar en contacto con distintos tipos de música, en particular la que se cantaba en España en la época de Cristóbal Colón y que llegó a México con la Conquista".

Jaramar empezó en el camino de la música antigua por una gran afinidad con ella. "Disfruto enormemente cantarla porque es bella, abre a quien la escucha una ventana diferente, en cuanto a sonidos, melodías y tiene que ver con las raíces de nuestra música: esta combinación de melodías moras, judías y de los romances españoles con versos muy sencillos, pero de una gran profundidad poética. Me enamoraron, y fue a partir de esto que yo empecé a fusionar (con la colaboración de mis músicos) estas canciones con otros ingredientes más cercanos a mi tiempo, como son la música mestiza mexicana, las sonoridades de los instrumentos electrónicos combinados con acústicos, la música contemporánea y el jazz, que es digamos el bagaje que llevamos mis músicos y yo. Es por todo esto que yo hablo de mi música como un mestizaje".

La artista ha trabajado mucho en la musicalización de poesía. "Uno de mis discos toma poemas de mujeres, desde el siglo XV al siglo XX, y al convertir estos poemas en canciones buscamos hacer una fusión de elementos musicales (sonidos, melodías, armonías, etcétera) del siglo XV con formas de la música tradicional mexicana y con elementos de la contemporánea. Entre las autoras de esos poemas están Florencia Pinar (siglo XV), Sor Juana Inés de la Cruz (siglo XVIII), y del siglo XX puedo mencionar a Pita Amor y Enriqueta Ochoa, entre otras".

También tiene un disco con canciones que toman la poesía de Nezahualcóyotl (Si yo nunca muriera). "Nosotros partimos del contenido poético para hacer la música de estos poemas que hablan de la fragilidad de la vida, de lo transitorio de nuestra estancia en el mundo, y del canto y de la poesía como lo que permanece cuando nosotros ya nos fuimos. La música de este disco tiene como objetivo ser un vehículo para transmitir el contenido poético de los textos".

Y hay otra parte que pone más en contexto su idea del mestizaje. "Es lo que viene a redondear el panorama de mi trabajo, que es lo que toca a la música tradicional mexicana. Si no incluyera estas canciones -aclara-, yo sentiría que mi trabajo está incompleto, que le falta mirar hacia las raíces de la música mexicana, reflejadas en la música tradicional y en la lírica popular. Es por eso que aparecen en mis discos canciones del Istmo de Tehuantepec, de Guerrero y de Veracruz, entre otras".

"Esta búsqueda -dice finalmente-, aunque es principalmente expresiva y muy personal, es también un viaje en el tiempo y en la música, en el cual mi banda y yo miramos hasta muy atrás en nuestra historia, sin perder la conciencia de ser músicos contemporáneos."

Jaramar ofrece un concierto, organizado por la Universidad Intercultural de Chiapas, este viernes a las 20 horas, en el teatro Hermanos Domínguez, de esta ciudad.