Estreno mundial de Serenata, de Ana Lara, en Instrumenta Verano Oaxaca

''Faltan obras contemporáneas para estudiantes''

ANGEL VARGAS ENVIADO

Oaxaca, Oax., 28 de julio. Una de las grandes problemáticas de la enseñanza musical en México, en lo que concierne a la música contemporánea, es la falta de un repertorio adecuado que permita a los estudiantes una aproximación más amable a esa vertiente del arte sonoro, sostiene la compositora Ana Lara.

En nuestras escuelas, apunta, lo que prevalece son partituras de amplio grado de dificultad y virtuosismo, propias no se diga para músicos profesionales sino para especialistas en este tipo de repertorio.

Más que alentar, lo que eso provoca es ''una resistencia natural en los estudiantes por la música contemporánea", explica la también docente, entrevistada con motivo del estreno mundial de su obra Serenata, que tendrá lugar este viernes en el contexto de Instrumenta Verano Oaxaca 2005.

''En el repertorio general hacen falta obras dirigidas a estudiantes de música, para que puedan comenzar a trabajar nuevas técnicas y propuestas. No deben ser largas ni complejas; ésas las harán ya después. Es necesario escribir repertorio para que los jóvenes abran los oídos y pierdan el miedo a las nuevas maneras de hacer música", subraya.

''Entre más se escriba repertorio de este tipo, más posibilidades habrá para el aprendizaje de los estudiantes. Existe una resistencia natural por la música de nuestro tiempo entre muchos jóvenes, pero conforme estén escuchando obras y eventualmente ellos puedan tocarlas, inmediatamente se interesarán más en interpretarlas. Es un deber y un privilegio conocer e interpretar lo más reciente de la producción."

Serenata es el título de la obra que Ana Lara presentará en el teatro Macedonio Alcalá. La escribió ex profeso para ser interpretada por los alumnos que este año acuden al programa de enseñanza musical de Instrumenta, y forma parte de un programa en el que se estrenarán mundialmente tres piezas más, comisionadas todas a autores nacionales.

Una de ellas, El viaje imaginario, fue escrita por Federico Ibarra, mientras que las dos restantes, sin título ambas, provienen del taller de experimentación musical del compositor oaxaqueño Víctor Rasgado.

La obra de Ana Lara, explica ella, consta de seis piezas para quintetos de alientos y cuerdas, y tiene como punto de inspiración la Serenata de Mozart; de allí su título.

''Es una especie de deconstrucción del material mozartiano, creada a partir, a veces, de una armonía, cadencia o un gesto musical", precisa. ''Pensé en hacer una música bastante directa, que no fuera muy difícil todo el tiempo, considerando que fue escrita para estudiantes.

''Pretendo que se comiencen a trabajar nuevas técnicas instrumentales, hacer combinaciones no ortodoxas y al mismo tiempo que sea música amable para los intérpretes, al estar basada en la gran partitura de Mozart."

Hechizo de la música barroca

El influjo hechizante de la música barroca enardeció anoche el teatro Macedonio Alcalá, con emociones dulces, vivificantes.

En lo que ya es un fenómeno reiterativo donde quiera que se presente, el virtuosismo técnico del flautista Horacio Franco fue capaz de convocar a una multitud que desde momentos antes del concierto hacía larga fila afuera del recinto y que después lo desbordó.

Il Gardellino, obra harto conocida por el flautista mexicano, cerró la noche.