Usted está aquí: viernes 29 de julio de 2005 Sociedad y Justicia Este es un país sin ley y así seguirá: Ramones

Este es un país sin ley y así seguirá: Ramones

La inseguridad no es privativa del DF ni del gobierno actual, opina el comediante

ARTURO CRUZ BARCENAS

Ampliar la imagen El conductor critica la incompetencia de todos los responsables de seguridad en el pa�FOTO Ivan Stephens /Cuartoscuro Foto: Ivan Stephens /Cuartoscuro

La inseguridad en esta ciudad y a escala nacional tiene sexenios y va a continuar, porque México se convirtió desde hace mucho tiempo en un país sin ley, expresa el comediante Adal Ramones, quien ya ha sido víctima de secuestro, y aclara que no se trata de atribuir a Andrés Manuel López Obrador la situación, porque "las corporaciones policiacas de todas las entidades han sido rebasadas".

La conversación con Ramones, a propósito del supuesto intento de secuestro contra su esposa, Gabriela Roxana Valencia Benítez, deja el testimonio de una figura pública que fue víctima de la violencia y estudia con su familia salir del país, aunque alude al fenómeno de la inseguridad en términos nacionales y sin hacer imputaciones particulares.

El martes pasado varios sujetos siguieron durante un tiempo a la esposa del comediante en el centro comercial Perisur, situación que detectó el equipo de seguridad de Valencia Benítez. Ahora la mujer retomó la idea de dejar el país. "De lo sucedido no puede culparse al jefe de Gobierno de la ciudad; la inseguridad es de antes y seguirá aunque él ya no ocupe el cargo", expresa Ramones.

"Algunos medios publicaron que fue un secuestro, pero yo nunca dije eso ni que se tratara de un robo, sino de que la iban siguiendo sistemáticamente. Pero eso de irnos de México me cuesta mucho trabajo, porque al no vivir aquí las cosas se complicarían.

"Aquí están nuestras familias y debería estar viniendo y yendo a hacer los programas. Habría un desgaste físico y muchas cosas más. Todo cambiaría."

En 1998, a unos días de su boda, el conductor fue plagiado y sus familiares pagaron el rescate. En enero de 2004, se libró de ser asaltado minutos después de acabar su programa. Y lo último ocurrió este martes 26 de julio.

-¿Tienes miedo por lo que ha pasado?

-El miedo lo tengo desde antes de que me secuestraran, hace siete años y medio. Vivo en el pánico, en el terror, todo el tiempo vigilado, con gente a la que le pagas para que estén cuidándote la espalda. ¡Sí, vivo con miedo!

La oportuna intervención del equipo de seguridad, que se percató de que los individuos seguían todos los movimientos de su cónyuge, es resaltada por Ramones. "Detuvieron a estas personas, no legalmente, sino para preguntarles qué hacían y quiénes eran. Uno de ellos sacó una credencial de policía judicial. Sí apanica pensar que haya agentes que formen parte de esas bandas", señala.

-¿Irse del país implicaría huir?

-A algunas personas les afecta más que a otras, pero no se necesita ser figura pública, como el entrenador Rubén Omar Romano (técnico de Cruz Azul), para sufrir algo así; no se necesita ser famoso para vivir en el terror. Han secuestrado a familiares, a conocidos míos, y está lo que pasó hace unas semanas con Mariana Levy, hija de Talina Fernández.

"También tenemos lo del hijo del cantante Vicente Fernández, que ocurrió fuera del Distrito Federal. Otro caso es el del papá del ex futbolista Jorge Campos, fuera de la capital también; o sea, la inseguridad no es algo privativo de la ciudad de México, puede ocurrir en cualquier parte, porque se expande.

"Cuando tu familia te ve a la cara y te dice 'saca a tu hija y a mí de aquí', pues qué haces. Vivo con esa presión. Mi mujer está muy asustada. Ella, siendo mi novia, vivió mi secuestro."

-Se puede hacer un uso político de lo que te pasó. Se da un caso de secuestro y se acusa al gobierno de Andrés Manuel López Obrador...

-Yo, realmente, no lo puedo acusar. Sé que se han hecho esfuerzos; creo, sí, que no se ha hecho lo suficiente. Los hechos nos han rebasado y no es privativo del tiempo en el que ha estado López Obrador en la Jefatura de Gobierno. Esto viene desde hace mucho tiempo.

"De chavito oía sobre la corrupción de (Arturo) Durazo (jefe de la policía capitalina en el sexenio de José López Portillo). No podemos achacarlo todo a un gobernante porque sería de nuevo un juego político acusar a una sola persona.

"Aquí la responsabilidad la tienen todos quienes pasaron por esos puestos. Todas las corporaciones que tuvieron a policías con antecedentes penales, inclusive a algunos que les detectaron que consumían drogas.

"Hubo policías en el estado de Morelos involucrados en secuestros. Sería engañar al público diciendo que es el jefe de Gobierno del DF. Esto rebasó a todas las corporaciones y a todo el que tuviera una responsabilidad de salvaguardar la seguridad de los habitantes.

"Eso tiene que ver con las ejecuciones en la frontera, en Reynosa, en Matamoros, en Tijuana; y no tiene nada que ver El Peje con eso. Desde hace varios sexenios éste se convirtió en un país sin ley."

Aclara también que lo sucedido el martes a su esposa nada tiene que ver con su problema con la Secretaría de Hacienda. "Al final de cuentas, algunas personas o figuras públicas podemos ser de alguna manera atractivos para los delincuentes, pero también sufre el ciudadano que no es público, el ciudadano que todavía guarda su anonimato, a Dios gracias.

"Sufre arriba de un microbús, del transporte público, al salir de un banco. Y no son famosos. Cuando me secuestraron, hace siete años, ya era una figura pública, pero cuando sufrí mi primer secuestro exprés no era nadie. No era conocido en el medio.

"Me retuvieron en un automóvil, me llevaron a un cajero para sacar dinero y me botaron en una colonia; tuve que recuperar mi auto, pero yo no era nadie para los medios. Por eso no relaciono esto con lo de Hacienda, en lo absoluto."

-¿Un secuestrador merece un trato humano, piedad?

-Podría ahondar mucho, pero mi secuestro duró una semana. No me tocaron un cabello, pero aun así sufrí, esposado de manos, amarrado de los pies, con una venda en los ojos y con algodones en los oídos. Tuve un sufrimiento sicológico, pese a que no me golpearon. Sufrió mi familia y mis amigos más cercanos, la gente que sabía del secuestro. Es una marca que me va a quedar por siempre.

Pena de muerte y cero tolerancia

"Yo no creo que la pena de muerte sea la solución, porque no podemos quitar la vida a nadie. Desgraciadamente muchas bandas de secuestradores le han quitado la vida a inocentes o los han mutilado. Si no han hecho ninguna de estas dos cosas, sí los han marcado para siempre.

"Sí debe existir la política de cero tolerancia con los secuestradores. Las leyes no deben ser tan débiles al respecto. Debe haber mayor vigilancia. Hay muchos focos de violencia en colonias del Distrito Federal y otros estados. ¿Qué se está haciendo? Numeritos van, numeritos vienen, pero los resultados ahí están.

"El martes se pudo detectar que seguían a mi esposa, ¿pero en cuántos casos no se detecta? Tampoco se puede hablar de secuestro ni de robo; se trató de un seguimiento metódico a mi esposa, comprobado con una grabación.

"No obstante, creo que aún se puede rescatar a este hermoso país. Estamos a tiempo. La pregunta es cuánto vamos a aguantar de aquí a que se dé ese rescate, si es que hay intenciones de hacerlo.

"Somos millones y vivimos aterrados, como ratones asustados por un solo gato. Debemos unir fuerzas. Mi comentario no va, en lo absoluto, contra López Obrador, porque los culpables son todos los que han ocupado puestos de responsabilidad y no han hecho nada para afrontar la delincuencia", concluye Ramones.

 
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