Inconformidad de vecinos
La creación de un nuevo campus de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) en el poniente de la ciudad ocasionó la inconformidad de un grupo de vecinos de la delegación Cuajimalpa, quienes se oponen a la construcción de esa cuarta unidad académica en una zona que, aseguran, "sólo está destinada a proyectos de preservación ecológica, como marca el uso de suelo".
Marisa González de la Vega, integrante de la comisión de prensa de la agrupación denominada Vecinos de Cuajimalpa, señaló que desde mayo de 2004, autoridades universitarias iniciaron la búsqueda de predios para la ubicación del campus, "sin considerar si existen o no las condiciones para llevarlo a cabo".
A finales de ese año, indicó, el Gobierno del Distrito Federal les otorgó un predio de 3.5 hectáreas con uso de suelo urbano en la zona de Santa Fe, sin que se concretara el proyecto debido a diversos problemas jurídicos.
Señaló que en mayo de este año se buscó un nuevo terreno en la zona de El Contadero, sin que existan permisos para cambiar el uso de suelo de preservación ecológica a uso urbano. Indicó que tras conocer la intención de construir un nuevo campus en medio de una zona boscosa, "nos opusimos al proyecto porque representaría un grave daño al entorno ecológico".
Agregó que durante los primeros acercamientos con autoridades universitarias, en junio pasado, "solicitamos que presentaran un estudio de impacto ambiental, el otorgamiento del cambio en el uso de suelo y el proyecto general para la construcción del plantel, sin que hasta la fecha se haya dado a conocer entre los vecinos cuál será el verdadero impacto que pueda generar un plantel educativo con miles de jóvenes".
Gónzalez de la Vega indicó que la zona no cuenta con vialidades suficientes para garantizar el acceso de estudiantes y docentes, lo que generará un "enorme deterioro en la calidad de vida para los habitantes de la zona, quienes ya enfrentan escasez de agua y de diversos servicios públicos".
Laura Poy Solano