Niegan que se avance en la consolidación de una política integral para la actividad

Caficultores corrigen de nuevo a Sagarpa

Pretende la dependencia desaparecer a 90% de los productores, advierte la CNOC

MATILDE PEREZ U.

La Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa) afirmó que avanza en la consolidación de una política integral cafetalera; ejemplo de eso es la entrega de 404.5 millones de pesos a 428 mil productores del grano en ocho estados, recursos correspondientes al ciclo 2004-2005.

Sin embargo, la Coalición Nacional de Organizaciones Cafetaleras (CNOC) destacó que la cosecha del actual ciclo es la más baja de los últimos 30 años; se realizaron las menores exportaciones en 34 años y el consumo total de café es igual al de mediados de los 70.

''La creciente pérdida en la competitividad de la caficultura se debe a la creciente importación por las empresas torrefactoras de cafés de baja calidad; la excesiva mezcla de granos de diferentes grados de maduración y alturas, y la falta de apoyos fiscales a los productores para que tengan beneficios húmedos y secos, y mejoren sus plantaciones", afirmó Fernando Celis Calleja, asesor de la CNOC.

Sagarpa desmintió los señalamientos de la Unión Nacional de Productores de Café de la Confederación Nacional Campesina, en relación con el atraso en la entrega de los recursos destinados a la producción cafetalera.

''La entrega de los recursos del programa de fomento productivo y mejoramiento de la calidad del café se hizo en tiempo y forma; además en 2004 se apoyó la creación de cinco fondos de garantías para dar valor agregado al café, con un apoyo del gobierno federal de 6.7 millones de pesos y una aportación de los productores de 9.33 millones de pesos, recursos que permitieron detonar una línea de crédito de 52 millones de pesos en beneficio de 13 mil 311 productores de café.''

Alfredo Fernández Gallegos, representante gubernamental en el sistema-producto café, aseveró que la política pública del gobierno ''se centra en crear mecanismos enfocados a un mejor rendimiento en las actividades del campo, a través de la organización de la sociedad rural para ser más autogestiva, participativa, productiva y competitiva".

La finalidad, mencionó, es avanzar en la consolidación de una política integral cafetalera para lograr un producto competitivo en el mercado mundial.

Sin expectativas de exportación

Celis Calleja subrayó que la política cafetalera nacional está sustentada en un modelo de consumo interno, pero no frena el uso de los cafés dañados o de robusta de menor calidad, los cuales se mezclan con azúcar y productos solubles en porcentajes cada vez mayores.

México, destacó, debe pugnar por el fortalecimiento de la Organización Internacional de Café y por la aplicación y respeto de la resolución 407 de esa instancia, la cual establece estándares mínimos de calidad en los granos de exportación; promover que los países productores establezcan la formación de reservas y retiros de los cafés de menor calidad cuando se presenten ciclos de altas cosechas, y establecer programas de diversificación de cultivos en las zonas no adecuadas para la producción cafetalera.

El asesor de la CNOC advirtió que el proceso masivo de reconversión de cafetales que pretende imponer Sagarpa con la finalidad de eliminar al 90 por ciento de los productores, con el pretexto de que "no son competitivos", sólo generará inconformidad en las regiones cafetaleras.

Hay que promover nuevas políticas para que los casi medio millón de caficultores, que ocupan 665 mil hectáreas en 12 estados productores, accedan directamente a los mercados y se les paguen mayores precios por calidad y origen, acotó.