Cuestionan el Plan de Emergencia, destinado a apoyar a 30 por ciento de la población

Protestan desempleados contra el gobierno del presidente uruguayo Tabaré Vázquez

Desmiente Eduardo Galeano versión periodística de que encabezaría marcha opositora

STELLA CALLONI CORRESPONSAL

Buenos Aires, 13 de julio. Unas 40 personas convocadas por la incipiente agrupación Unión de Trabajadores Desocupados (UTD) se manifestaron ante el Ministerio de Desarrollo de Uruguay, que encabeza la dirigente del Partido Comunista Marina Arismendi, lo que provocó varias advertencias, entre ellas de la Central de Trabajadores de Uruguay (PIT-CNT), sobre el "sentido provocador" que han tenido las acciones de estos grupos en las últimas horas.

Anoche un pequeño grupo cortó la salida del histórico Cerro de Montevideo quemando llantas, y de la misma manera lo hicieron en otros cuatro puntos de la ciudad y sus alrededores. En el Cerro, barrio de trabajadores, los vecinos rechazaron abiertamente esta situación. El periódico La República hizo referencia a grupos ultras de izquierda y de derecha, que comenzaron su accionar en las últimas horas.

Para varios analistas, si bien hay discusiones en el seno del gobierno frenteamplista de izquierda del presidente Tabaré Vázquez por algunos temas, en especial los económicos y otros, estos movimientos no corresponden a la situación y generan dudas.

Antes de las elecciones que definieron el triunfo del Frente Amplio a fines de 2004, desde Buenos Aires llegaron algunos dirigentes del trostkista Partido Obrero (PO) de Argentina, y también de los seguidores del desprestigiado dirigente piquetero (desempleado) Raúl Castells, intentado crear organizaciones similares en Uruguay. En ese entonces fueron rechazados por todos los sectores, porque además esto coincidía con proyectos de la derecha.

Estos antecedentes, a los que se añade un intento de cierta prensa opositora de anunciar que el escritor Eduardo Galeano encabezaría una marcha contra el gobierno de Vázquez, lo que él mismo se encargó de desmentir, produjeron cierto escozor en la sociedad uruguaya. Galeano estuvo en una mesa donde fue muy preciso al afirmar que se estaban debatiendo ideas, porque el debate precisamente había sido una de las construcciones frenteamplistas a lo largo del tiempo.

Todos los medios coinciden hoy en que la movilización planeada ante el Ministerio de Desarrollo no cumplió las expectativas de quienes la organizaron y los dirigentes de UTD, a quienes diversos medios atribuyen "viejos radicalismos ultras", advirtieron que la próxima semana harán otra marcha.

En el trasfondo está un reclamo existente para que se apresure el Plan de Emergencia que asistirá a más de 100 mil indigentes, víctimas de los planes neoliberales de los gobiernos anteriores y de la injusta estructura del país, agregando a la tragedia un alto desempleo.

El Plan de Emergencia prevé un ingreso ciudadano, y a la vez preparar y educar para rápidamente ubicar a los desocupados en un trabajo estable, ocupándose especialmente de rescatar a los niños más necesitados para proporcionales rápidamente alimentos, salud y educación. El ministerio realizan verificaciones para resolver la situación con extrema justeza, según se dijo. Hay propuestas para seguir visitando familias que no están aún comprendidas en los planes, y también ofrecimientos para apresurar los censos.

Hubo también acusaciones a algunos dirigentes de UTD que fueron señalados como instigadores de "piquetes" (bloqueos) implantados artificialmente en el país. La ministra Arismendi dijo que el diálogo estará abierto para hablar con todos aquellos que estén en el plan y "dialogar en buenos términos, porque saben que estamos dispuestos a ello y han visto el trabajo que estamos haciendo".

Los dirigentes sindicales de la PIT-CNT ofrecieron su colaboración al ministerio para avanzar más rápidamente en el Plan de Emergencia.

Tanto Juan Castillo como otros dirigentes de esa central de trabajadores advirtieron que "la reiteración de hechos políticos de las últimas horas tienen un claro sentido provocador tendiente a desestabilizar un proceso que recién empieza".

El Plan de Atención Nacional a la Emergencia Social es de "prioridad absoluta" en una sociedad donde el Instituto Nacional de Estadística registra más de 900 mil pobres (casi 30 por ciento de la población total), de los cuales 120 mil son "indigentes". Pero esto parece extenderse a unos 300 mil que sobreviven en la "pobreza dura o crónica". Otros datos señalan que 57 por ciento de los niños nacen en hogares con las "necesidades básicas insatisfechas".

En el Plan de Emergencia hay una serie de subplanes que incluyen empleos temporales y protecciones básicas. Hay más de 111 mil personas inscritas, y ya hay quienes reciben subsidios, pero ahora las nuevas propuestas tienden a apresurar y dinamizar el proyecto. A poco más de cuatro meses del gobierno frenteamplista hay varios conflictos en puerta.