MEXICO SA
Patético balance del gobierno del ''cambio'' en materia laboral
México requiere 100 mil empleos al mes
CON LA CALCULADORA del "cambio" en la mano -aquella que siempre suma, nunca resta-, va de nuevo la gastada cantaleta presidencial sobre los "grandes logros" que en materia de empleo reporta su gobierno, y junto a ella las cifras distintas, las informaciones encontradas, los resultados parciales.
EL PRESIDENTE FOX DICE que "seguramente vamos a terminar" 2005 con 500 mil empleos adicionales en el renglón formal de la economía. Eduardo Sojo, el coordinador de Políticas Públicas en funciones de vocero suplente, dice que no, que serán 400 mil, es decir, una diferencia de 25 por ciento entre una cifra y la otra.
ASEGURA EL PRIMERO que el empleo formal registrado en el Instituto Mexicano del Seguro Social para el total del país "ha rebasado, ya con una muy buena cantidad, la cifra histórica más alta (sic) que habíamos tenido en el pasado; de hecho, esta cifra es el máximo nivel histórico y representa más de 400 mil empleos (384 mil para ser exactos) sobre las cifras del año pasado, y seguramente vamos a terminar con 500 mil empleos más de esas cifras".
DICE EL SEGUNDO que hasta junio pasado se registraron 290 mil empleos en el IMSS, "lo cual nos ubica en la perspectiva de tener un número de empleos formales asegurados cercanos a 400 mil, a finales de este año que sería 25 por ciento más de lo que se tuvo el año pasado, que fueron 318 mil. Entonces, tenemos un año de crecimiento moderado, pero con mayor generación de empleos que el año pasado".
ASI COMO SON DE PUNTILLOSOS cuando la información no les favorece (las del FMI y del Banco Mundial, por ejemplo), deberían serlo a la hora de presentar el patético balance del "cambio" en materia laboral, en el que monseñor Carlos Abascal -quien en nombre del Altísimo ahora despacha en Bucareli- tiene mucho que ver.
ENTONCES, LA "MUY buena cantidad" de empleos y "la cifra histórica más alta que habíamos tenido en el pasado" (Fox dixit, obviamente) se reduce a real cuan ridículo "incremento" de 0.19 por ciento en el empleo formal registrado en el IMSS entre el primero de diciembre de 2000 y el 30 de junio de 2005. Además, el patético resultado se debe a la generación de plazas eventuales, porque en las permanentes se reporta la cancelación de más de 232 mil puestos de trabajo.
A LO LARGO DEL gobierno del "cambio", la generación de empleo formal (todo eventual) suma 24 mil 658 plazas, lo que promedia la creación de 456 plazas laborales mensuales o, si se prefiere, 15 diarias, desde el primero de diciembre de 2000 al 30 de junio de 2005, es decir, 54 meses.
EN MÉXICO, LA DEMANDA real se aproxima a 100 mil empleos mensuales, o si se prefiere 3 mil 333 diarios, una cantidad 222 veces superior al gran "logro" que el presidente Fox no deja de celebrar. De hecho, si el inquilino de Los Pinos hubiera cumplido su promesa de campaña (generar un millón 350 mil empleos formales cada año), la creación cotidiana de plazas laborales tendría que haber sido de 3 mil 750 y no de 15 (una diferencia de 250 tantos a favor de la promesas y en contra de la realidad) que hoy el guanajuatense insiste en presentar como la "muy buena cantidad" y "la cifra histórica más alta que habíamos tenido en el pasado".
EN EFECTO, EN LOS primeros seis meses de 2005 el IMSS registra poco más de 290 mil plazas adicionales a las reportadas en diciembre de 2004. Sin embargo, tanto al presidente Fox como al coordinador Sojo se les olvidó matizar el dato: de esa cifra, el 76 por ciento corresponde a empleo eventual y el resto a empleo permanente, amén de que en esos 54 meses de gobierno se acumula una pérdida superior a 232 mil plazas permanentes.
DE ENERO A JUNIO DE 2005 se han registrado en el IMSS poco más de 290 mil empleos formales (la mayoría, como se menciona, eventuales), lo que es motivo de orgullo para el inquilino de Los Pinos y sus jilgueros. Sin embargo, en ese mismo plazo la demanda real -sin considerar el rezago acumulado- se aproximó a las 675 mil plazas, 2.32 veces más que el gran "logro" del "cambio", de tal suerte que sólo ellos saben qué es lo que celebran.
EL INQUILINO DE LOS PINOS aseguró que la jugosa creación de empleos durante su gobierno -como él le llama- es producto "del crecimiento con estabilidad que estamos logrando juntos. Muchos de ustedes aquí recordarán allá los años 50 y los años 60 aquellas dos décadas de crecimiento y desarrollo estabilizador, donde el país creció no sólo con estabilidad sino con bajas tasas de interés sin endeudamientos y esto benefició directamente a las personas. Después caímos en una época que yo denominaría casi total, durante 25 años hasta volver a partir del año 95, nuevamente un desarrollo estabilizador, donde en estos últimos 10 años ya no hemos tenido crisis devaluatorias, crisis financieras, crisis económicas o de cualquier otro tipo. Diez años de estabilidad nos están dando posibilidades fuertes de desarrollo, el control de la inflación, las bajas tasas de interés, que en el año 2004 promediaron 6.8 por ciento las tasas, el bajo riesgo país, las reservas más altas en la historia, más de 62 mil millones de dólares".
Y 50 MILLONES DE POBRES, se le olvidó mencionar, como también dejó a un lado que en aquellos tiempos del desarrollo estabilizador -que ahora reivindica y a los que quiere sumar a su administración- el crecimiento económico se registró a tasas nunca repetidas en los sexenios "modernizadores", neoliberales y globalizadores.
EL INQUILINO DE LOS Pinos ha inventado que México vive una nueva etapa del desarrollo estabilizador, y para demostrarlo oculta el elemento principal: un patético crecimiento económico promedio de 1.5 por ciento anual, cuando en el periodo del desarrollo estabilizador dicho promedio nunca fue menor de 6 por ciento.
Las rebanadas del pastel:
PARA "DEMOSTRAR" QUE los Primeros Vástagos de la Nación de las Faldas -léase los cachorros de Martita- no le meten el diente al erario, ni hacen suculentos negocios con los contratos gubernamentales, el Infonavit, a cargo de Víctor Manuel Borrás, decidió gastar una buena cantidad de recursos públicos en desplegados e inserciones en los medios de comunicación, amén de utilizar su red de Internet con el mismo propósito. Hay que recordar lo que dicen los clásicos: a los nenes se les acusa de abusivos, no de pendejos.