Más de 618 mil visitantes, cifra contabilizada por el Museo Nacional de Antropología

Faraón se erige como la muestra más vista de todos los tiempos

Desde las 20 horas del domingo, el director del INAH ordenó la entrada gratuita al recinto

Sorpresa de comisarios alemanes de la exposición, ante la masiva afluencia de público

CARLOS PAUL

Al superar todas las expectativas de asistencia a una exposición temporal extranjera en México, Faraón: el culto al Sol en el antiguo Egipto se erige en la más visitada de todos los tiempos, pues fue vista por más de 618 mil 500 personas, según contabilizó el Museo Nacional de Antropología, recinto en el que se exhibió.

En esa cifra se incluyen las más de 300 visitas guiadas, con grupos integrados por 25 a 30 personas.

Todavía a las 23:30 horas del pasado domingo, último día en que se pudieron apreciar las 152 piezas de la exposición, seguían entrando visitantes.

Los últimos en salir, confirmaron fuentes del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), lo hicieron a las 3 de la madrugada del lunes.

Entusiasta espera

El domingo 10, los primeros en llegar lo hicieron al filo de las dos de la mañana. Conforme pasaban, no las horas, sino los minutos, la fila comenzó a crecer.

Cientos de niños, jóvenes y adultos, parejas y familias, muchos con paraguas, sillas plegables, bancos, libros, periódicos y revistas, tomando agua, refrescos, sopas instantáneas, frituritas o con su lunch casero como si fuera día de campo, conformaron una extensa fila que, como cuerpo de serpiente se movía impaciente, acalorada, pero entusiasta, esperando ver la milenaria y singular muestra.

La inmensa fila serpenteaba por entre los vendedores ambulantes, quienes hicieron su agosto. Para las 15:30 horas, la hilera de personas iba desde la entrada principal del museo, pasaba por la explanada, recorría Paseo de la Reforma, doblaba por la calle de Gandhi, se internaba por el bosque y llegaba más allá del museo Rufino Tamayo, hasta la altura del Deportivo Chapultepec.

El recorrido implicaba de cinco a 10 horas para entrar propiamente a la exposición.

Singular también fue el último día de exhibición, pues poco antes de las 20 horas -de acuerdo con el instituto- habían ingresado 595 mil 677 personas. Minutos después ''Felipe Solís, director del museo, recibió instrucciones de Luciano Cedillo, director general del IHAH, para que a partir de ese momento la entrada fuera gratuita, en agradecimiento al interés del público por visitar Faraón''.

Así, pudieron entrar al recinto alrededor de 5 mil 650 personas más, ''superando los 13 mil asistentes, tan sólo el domingo''.

La muestra de los tesoros egipcios, que desde su inauguración generó extensas filas para entrar, forma parte del ciclo Grandes Civilizaciones.

En Faraón se pudieron apreciar más de tres mil años de historia representados por una colección de obeliscos, esfinges, joyas y otras piezas. Fue inaugurada el pasado 29 de marzo y se tenía previsto clausurarla el 30 de junio, es decir, permanecería en el país tan sólo tres meses.

Sin embargo, la demanda del público, cuya asistencia era de aproximadamente 6 mil personas por día -con excepción de los últimos días que rebasó las 9 mil personas- provocó que autoridades del INAH acordaran con sus pares de Alemania una prórroga de 10 días, por lo que la muestra estuvo expuesta durante 104 días, registrando una cifra récord de asistencia para una exposición temporal en México, en comparación con las anteriores de ese ciclo, que hasta el momento se encuentra conformado por Magna Grecia y Sicilia, a la que asistieron 400 mil personas; Los etruscos: el misterio revelado, visitada por 420 mil, y China Imperial: las dinastias de Xi'an, con 350 mil visitantes.

Comienza el embalaje

El embalaje de las 152 piezas de Faraón comienza hoy martes y durará de 15 a 20 días, informó Oscar Sánchez, subdirector de Museografía del la Coordinación Nacional de Museos y Exposiciones del INAH.

Los comisarios alemanes, quienes se vieron sorprendidos por la respuesta del público a esta muestra, llegaron a México el 8 de julio para organizar el traslado de la colección, pues, comentó Sánchez, ''el procedimiento es largo. No se trata de quitar, guardar y ya. Primero se checará que no exista ningún error en los mecanismos de conservación, luego se espera a que las piezas se estabilicen, para finalmente hacer el embalaje.

''Se desmontan, se dictamina pieza por pieza, luego se les instalan protecciones especiales a las más delicadas y finalmente se embalan y clasifican.''

La colección, que nunca había salido de Alemania, regresará así en pocos días al recinto que las resguarda, el Museo Egipcio de Berlín, el cual se encuentra ahora en la Isla de los Museos, en el centro de la capital alemana, para ser reubicada el próximo 3 de agosto en una de sus salas.