En discurso programado antes del 7-J, insta a proseguir la lucha contra el terrorismo
No perderemos nuestra sangre fría, afirma Bush
Quantico, 11 de julio. El presidente de Estados Unidos, George W. Bush, llamó hoy lunes a los estadunidenses mantenerse firmes respecto a Irak y la lucha contra el terrorismo. Reiteró que los ataques con bomba en Londres del jueves pasado fueron una agresión contra el mundo civilizado y juró que "no nos vamos a rendir".
El discurso de Bush que tuvo lugar en la Academia de la Oficina Federal de Investigaciones (FBI) en una base militar en Quantico, Virginia, ya había sido programado mucho antes de que se registraran los atentados en la capital británica.
"Esas personas que hicieron explotar vagones de metro y autobuses no son personas con las que se pueda negociar. O a las que se pueda hacer razonar. Los terroristas saben que no pueden vencernos en el campo de batalla. El único medio que tienen los terroristas para ganar es que perdamos nuestra sangre fría. Eso no ocurrirá durante mi mandato", declaró Bush.
El jefe de la Casa Blanca quien estaba con el primer ministro británico, Tony Blair, en la cumbre del Grupo de los Ocho en Escocia cuando se suscitaron los ataques del 7-J, indicó que no está claro quién es el responsable pero apuntó que "hemos dañado a la red Al Qaeda en el mundo".
El presidente estadunidense ha recibido fuertes apoyos a su gestión por el liderazgo en la lucha contra el terrorismo tras los ataques del 11 de septiembre de 2001 contra Washington y Nueva York. Pero, ahora es visto con gran escepticismo por cómo conduce la campaña bélica en Irak, la que él ve como el frente central de su guerra contra el terrorismo.
La opinión pública estadunidense se encuentra cada vez más dividida sobre la necesidad de mantener a sus 130 mil soldados en Irak y se preocupa también por el aumento de muertos y heridos en sus filas.
"Los terroristas pelean en Irak porque saben que la existencia de su ideología de odio está en juego. Saben que si la libertad se arraiga en Irak, llevará a millones (de personas) a lo largo de Medio Oriente a reclamar su libertad", subrayó.
El presidente estadunidense aseguró que permanecerá "a la ofensiva. Combatimos al enemigo en Irak. En Afganistán y en el mundo para que no tengamos que enfrentarlos aquí en casa", agregó.
En tanto, la policía de Nueva York ordenó la desconexión del servicio de telefonía celular en todos los túneles del metro para impedir que terroristas detonen bombas. La medida, de carácter indefinido, forma parte de los cambios en seguridad que tras los atentados de Londres se comenzaron a aplicar.