Acepta incremento de conflictos que afectan a tzotziles
Actualiza la CDI monografías de 20 pueblos indígenas
La Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas (CDI) actualizó monografías de grupos étnicos; en la relativa a los tzotziles, en Chiapas, reconoce que la "incapacidad para oírlos, la estrechez de los canales de movilidad social, los mecanismos tradicionales de control político, la sobreposición de las esferas política y religiosa, y más, han agudizado conflictos e intensificado la violencia en el área" donde se encuentran asentados.
También acepta que pese a que con el surgimiento del Ejército Zapatista de Liberación Nacional se admitió la injusticia social prevaleciente contra los indígenas, la política educativa nacional que impuso la enseñanza básica en español provoca, como en el caso de los matlatzincas, en el estado de México, preocupación ante el riesgo de pérdida y desaparición de idiomas.
Para la CDI es válida la frase del libro Chiapas, los rumbos de otra historia, de Viqueira y Ruz, de que a partir del primero de enero de 1994 ese estado dejó de ser concebido la frontera mexicana con el pasado para convertirse en un referente del futuro nacional. Entonces pasó de última trinchera a vanguardia.
Asegura que la rebelión de los tzeltales, tojolabales y otros grupos impactó hondamente a la sociedad nacional, provocando que un sector de ésta fraternizara con el proceso, al adoptar una actitud solidaria, lectora y reflexiva "que ha ido conformando un pensamiento de hermandad en una gran mayoría de jóvenes, estudiantes, intelectuales, artistas y organizaciones de pueblos que se involucran con la exigencia de los derechos indígenas haciéndola propia".
De acuerdo con la CDI, los indígenas de Chiapas no son víctimas o sujetos pasivos de la modernidad, sino "agudos observadores del lugar que ocupan en la configuración étnica y social del mundo actual; son grupos plenamente conscientes de las circunstancias reales en las que están inmersos.
"Muchos aspectos de su cultura reflejan gran tensión, producto de la relación desigual que por siglos han mantenido con los ladinos (mestizos). Ya sea por la vía religiosa o política, es claro que en décadas recientes han buscado presionar para entablar con la sociedad una relación más equilibrada y justa."
Por otra parte, también se aborda en las monografías, que forman parte de la serie Pueblos Indígenas del México Contemporáneo, la confianza en que la enseñanza de las lenguas indígenas perviva en el conjunto del saber tradicional, de la memoria, cosmovisión y costumbres que se transmiten día con día dentro de las etnias.
Hoy se presentarán en el Museo Nacional de Antropología e Historia los 20 títulos en los que se abordan, por separado, historias de los pueblos pames, tarahumaras, matlatzincas, tzeltales, chontales de Oaxaca, mixtecos, huaves, otomíes del estado de México, nahuas de la Huasteca, nahuas del Alto Balsas, nahuas de la sierra norte de Puebla, huicholes, tzotziles, mixes, guarijíos, tepehuanes del norte, huastecos, tepehuas, coras y totonacos.