Reforma de la ONU
México debe involucrarse, según Derbez
Puebla, Pue., 30 de junio. Para bien de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en su esfuerzo por reformarse integralmente, la comunidad internacional no debe permitir "soluciones parciales" que sólo dejarían una institución fragmentada e incapaz de atender las demandas para las cuales fue creada, advirtió el secretario de Relaciones Exteriores, Luis Ernesto Derbez, quien anunció que México también se involucrará en el tema de la reforma administrativa y presupuestaria del organismo internacional.
Al inaugurar la reunión sobre la reforma de la ONU en materia de derechos humanos, el canciller insistió en que la comunidad internacional "debe ser cuidadosa" de que el debate sobre la reforma al Consejo de Seguridad no impida ni obstaculice los cambios en otros temas que son igual o más importantes, como los derechos humanos.
Ante la alta comisionada de Derechos Humanos de Naciones Unidas, Louise Arbour, y delegados de 30 países, el diplomático señaló que la propuesta del gobierno mexicano es que dicha comisión se transforme en un consejo, con el propósito de dotarlo de mejores instrumentos y mayores recursos económicos para su operación.
En este mismo sentido, Louise Arbour, de nacionalidad canadiense, dijo a los asistentes que no se puede ser complaciente ni terminar con una "reforma cosmética" mediante la cual sólo se cambie de nombre, "pues se tiene sobre la mesa un momento sólido para hacer realidad la transformación integral de la ONU, y con ella de su instancia encargada de los derechos humanos".
En conferencia de prensa posterior, el secretario Derbez aclaró que el involucramiento de México en la reformas administrativa y presupuestaria de la ONU se debe a un solicitud expresa del secretario general del organismo, Kofi Annan. Además, señaló que el gobierno mexicano está impulsando la creación del consejo económico y social, que fue una de las entidades que impulso la nación en 1945.
Puntualizó que México va a proponer que se hagan reasignaciones presupuestarias para aquellos grupos, áreas y tareas que considera que deben ser prioritarias, entre ellas la propia Comisión de Derechos Humanos.
Por otra parte, el canciller planteó la necesidad de que México participe de una manera más activa en las misiones de paz, y aclaró que ello no significa necesariamente el envío de tropas ni que sea una acción injerencista.
Se trata, precisó, de participar en estas misiones enviando ingenieros y médicos militares para labores de reconstrucción y de sanidad, o grupos de civiles que puedan dar asistencia humanitaria.
De esta manera, consideró, el país puede contribuir a esta responsabilidad, de la que ningún país está exento, que es la de asegurar que en el mundo no haya conflictos, y que si éstos se dan se respeten los derechos humanos de los ciudadanos de cualquier nación.
Indicó que el país ya está asumiendo los costos, pues es el décimo contribuyente de Naciones Unidas. "Estamos pagando una cantidad increíble de dinero" para que se mantengan tropas de paz en los países que lo necesitan, subrayó.
"Dado que ya estamos haciendo el pago correspondiente en efectivo, nos cuesta de nuestro erario (sic) que tengamos todavía reticencia de que también haya presencia de personas, de tropas, dado que ya estamos financiando tropas de cualquier forma", dijo.
Hay que recordar que si se da esta participación, el gobierno mexicano podría solicitar una reducción en el monto de sus contribuciones a la ONU.