El Afganistán ocupado por EU, principal productor de opio en el mundo
Al menos 200 millones de personas consumieron drogas ilegales en 2004: ONU
Representa un negocio de alrededor de 320 mil millones de dólares, alerta informe anual
Ampliar la imagen Giovanni Quaglia, representante de la oficina antidrogas de la ONU en Brasil y el Cono Sur, dialoga con reporteros en R�de Janeiro FOTO Ap Foto: Ap
Viena, 29 de junio. Unos 200 millones de personas consumieron drogas ilegales durante 2004, lo que constituye un negocio de unos 320 mil millones de dólares y una cifra "superior al producto interno bruto individual de casi 90 por ciento de los países del mundo", señala el informe anual de la Organización de Naciones Unidas (ONU).
Se trata de 5 por ciento de consumidores de estupefacientes de la población mundial con edades de entre 15 y 64 años, "monstruo" difícil de liquidar pues además la incautación de drogas en el ámbito internacional se mantuvo estable desde 2003, añade el reporte dado a conocer hoy.
El número de toxicómanos aumentó en 8 por ciento debido principalmente a la creciente popularidad del cannabis (hachís y marihuana), que fue consumido por más de 160 millones de personas en 2004, o sea, 10 millones más que el año anterior.
Mientras las drogas de síntesis -anfetaminas, metanfetaminas y éxtasis- retrocedieron a 34 millones de consumidores contra 38 millones el año anterior, los opiáceos y la cocaína, considerados por la ONU las "drogas más problemáticas", progresaron.
Casi 16 millones de personas eran dependientes del opio, la morfina o la heroína (15 millones en 2003) y 13.7 millones habían consumido cocaína (13 millones en 2003), según el informe de la Oficina de Naciones Unidas contra la droga y el crimen.
Pese a una baja en Laos y Birmania, la producción mundial de opio progresó levemente en 2004 a 4 mil 850 toneladas, debido al lugar cada vez más importante que ocupa Afganistán desde la invasión estadunidense, hace tres años, que representaba 87 por ciento del mercado mundial, pese a que antes el régimen talibán había terminado por casi erradicar los cultivos de amapola.
Al igual que el consumo, la producción de cannabis aparece en pleno auge, con progresión de 25 por ciento entre 2003 y 2002, a 40 mil toneladas. "Todos los indicadores -producción, incautaciones y consumo- señalan que el mercado mundial sigue progresando" y "todo hace creer que la expansión continuará", alerta la ONU.
Luego de varios años en baja, la producción de cocaína se mantuvo estable en 2004 con 687 toneladas, 26 por ciento menos que en 1999, subraya el informe.
La baja del consumo mundial de drogas de síntesis se explica por el desmantelamiento muchos laboratorios clandestinos en Tailandia, en 2002, así como por un retroceso de esas drogas en Estados Unidos.
En términos de salud pública, los opiáceos aparecen como la preocupación principal en Europa y Asia (62 por ciento de los pedidos de tratamiento en 2003), en tanto que la América del Sur parece particularmente afectada por la cocaína (59 por ciento) y Africa por el cannabis (64 por ciento).
Marcado por el aumento del consumo de cannabis, el mercado europeo también contempla "el aumento del grado de pureza de la heroína", signo de una oferta en subida, se preocupa la oficina de la ONU. Europa también se caracteriza por un progreso del mercado de la cocaína en 14 naciones.
La producción de cocaína se estabilizó, lo mismo que los precios y el consumo, en Estados Unidos, pero la demanda progresó en Europa en 2004. "Curiosamente, en lugar de hacer que suban los precios, éstos han bajado en los principales mercados".
El consumo de coke parece bajar en América del Norte, contrario a lo que sucede en Europa, cada vez más aprovisionada a través de Africa, España y Holanda.
Tras varios años de baja, la producción de cocaína se mantuvo estable en 2004, con 687 toneladas, o sea 26 por ciento menos que en 1999. El número total de consumidores en el mundo es calculado en unos 14 millones, de los cuales dos tercios se hallan en continente americano, asienta el informe.
Los tres primeros productores de hojas de coca y de su derivado, la cocaína, son Colombia con 50 por ciento, Perú con 32 y Bolivia con 15 por ciento. La disminución de las superficies cultivadas en Colombia se compensó con los aumentos en Perú y Bolivia, en 2004.
Las incautaciones de cocaína en el mundo alcanzaron la cifra récord de 495 toneladas en 2003, la mitad de ellas en América Latina, "lo que representa un índice de intercepción récord, 44 por ciento", según las estimaciones.