Silicatos y Derivados no cumple ni 10% de normas ambientales: Ecoguardias de Guadalajara

Jalisco: Profepa, a punto de certificar como limpia a empresa contaminante

Fuga de vapor de ácido sulfúrico intoxicó a 39 personas la semana pasada; fue sicológico, según delegado

CARLOS GARCIA CORRESPONSAL

Guadalajara, Jal., 27 de junio. A pesar de que en dos años han ocurrido tres fugas de vapor de ácido sulfúrico de las instalaciones de la empresa Silicatos y Derivados -la más grave fue la del pasado 22 de junio, que provocó la intoxicación de 36 menores de edad y tres adultos en la colonia Miravalle de esta ciudad-, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) está a punto de otorgar a dicha compañía la certificación de "industria limpia".

Trinidad Muñoz Pérez, delegado de la dependencia, cuyo titular es el ex gobernador de Querétaro Ignacio Loyola, minimizó los daños que la fuga más reciente ocasionó a las 39 personas, 30 de las cuales tuvieron que ser hospitalizadas, al afirmar que "pudieron simplemente sufrir una intoxicación sicológica.

"Fue algo ligero y pudo ser cuestión hasta sicológica, de alguien que detectó un mal olor y dijo: ¡Ah caray!, qué feo huele. Los niños sobre todo son más susceptibles a sufrir vómitos, mareos, etcétera", señaló el funcionario, quien también es uno de los promotores del ex gobernador Alberto Cárdenas Jiménez, como candidato a la Presidencia de la República.

Muñoz Pérez ratificó que la planta de Silicatos y Derivados, una de las dos que la compañía estadunidense PQ tiene en México, está por recibir su certificado de industria limpia, luego de un proceso que comenzó el año 2000 en la Profepa.

Sin embargo, el director de la Cruz Verde de Guadalajara, Alfonso Gutiérrez Carranza, negó que los síntomas que presentaron las 30 personas hospitalizadas por inhalar el vapor de ácido sulfúrico pudieran haber sido "sicológicos", como especuló el delegado de la Profepa.

"Eso es impensable. Cuando es mental o sicosomático generalmente una persona ya trae algún otro problema. Aquí se atendió a quienes sufrieron mareos, dolores de cabeza, irritación en los ojos y hasta vómitos, por lo que fue necesario proporcionarles oxígeno y en el caso de una maestra, hasta medicamentos", detalló.

En los dos años recientes, en las instalaciones de la empresa Silicatos y Derivados han ocurrido tres fugas, las cuales han ocasionado alarma entre los habitantes de la ya de por sí altamente industrializada, y por ende contaminada colonia Miravalle, en el sur de Guadalajara,

Hace 7 meses, un exhorto de Ecología municipal

En noviembre del año pasado, la compañía recibió un apercibimiento de la Secretaría de Ecología y Medio Ambiente municipal, debido a que las emanaciones de vapor de la sustancia química referida afectaban directamente el medio ambiente.

"Es una empresa que está trabajando bien. Hay un plan de acción para poder obtener el certificado, y allí van, de acuerdo con lo que marca el programa", insistió Muñoz Pérez, quien aseguró que "hasta el momento no hay indicios que hagan suponer que fue Silicatos y Derivados la causante de la fuga por la que resultaron intoxicadas 39 personas".

La visión del funcionario de la Profepa sobre la planta -que produce, entre otras sustancias, silicato de aluminio mediante procesos de calor en un reactor, y es una de las 68 que la matriz PQ, con sede corporativa en Valley Forge, Pensilvania, Estados Unidos, tiene en 19 países-, no coincide con la del director de Ecoguardias de Guadalajara, Francisco Lozano, quien afirmó que hasta el propio gerente de la empresa, Roberto Alfaro Vargas, reconoció que hubo un problema el 22 de junio que provocó la vaporización directa de ácido sulfúrico a la atmósfera.

Además reveló que después de que personal a su cargo ha realizado visitas e inspecciones a las instalaciones de Silicatos, se pudo establecer que la compañía "no cumple ni con 10 por ciento de la normatividad vigente para obtener su certificación como industria limpia.

"El delegado (Trinidad Muñoz) debe darse una vuelta por la empresa; si conociera un poquito en materia ambiental se daría cuenta de que no cumple ni con 10 por ciento de requisitos para ser certificada, pues existe un manejo inadecuado de residuos y se producen emisiones a la atmósfera de vapor de ácido sulfúrico. ¿Cómo van a certificar una empresa con todas esas deficiencias?", se preguntó Francisco Lozano.

Después de un recorrido de La Jornada por las instalaciones de la compañía citada se corroboró que, efectivamente, desde el momento en que se descarga hidróxido de aluminio -materia prima para la producción de silicato de aluminio- de los furgones de ferrocarril a las bodegas, las emisiones de polvo son intensas debido a que este procedimiento no se realiza en una zona aislada.

Según el reporte 3109, bajo la orden de visita 2764-05 de Ecoguardias, el equipo y los procesos productivos empleados en Silicatos y Derivados "son obsoletos", pero la compañía "se ha negado a renovarlos.

"De acuerdo con la verificación practicada durante la contingencia -hace cinco días-, detectamos, e incluso Alfaro Vargas lo reconoció, que efectivamente se produjo una emisión de ácido sulfúrico. No se necesita mucha ciencia para determinar que afecta directamente el ambiente", ironizó el jefe de Ecoguardias.

Lo más probable, agregó, es que esos vapores se salieron de control y al desplazarse hacia la atmósfera afectaron la salud de 39 personas. Finalmente, Francisco Lozano aseveró que aunque Silicatos y Derivados reciba su certificado de "industria limpia" por la Profepa, "cualquier nueva emergencia que se produzca en instalaciones de esta empresa -que, asegura, obtiene ganancias superiores a 500 millones de dólares anuales-, será motivo de clausura total por el ayuntamiento de Guadalajara".