Fue elaborado por la Secretaría de la Defensa Nacional
El conflicto en Chiapas, excluido del libro blanco
El documento ofrece una visión general sobre la situación de las fuerzas armadas y su proyección a 2025
Ampliar la imagen Movilizaci�ilitar efectuada ayer entre Tuxtla Guti�ez y San Crist� de las Casas FOTO V�or Camacho Foto: V�or Camacho
El libro blanco, elaborado por la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), que tiene como propósito ofrecer una visión general sobre la situación que guardan las fuerzas armadas y la proyección del Ejército y Fuerza Aérea al año 2025, no hace mención alguna del conflicto armado en Chiapas, que data de enero de 1994. Sin embargo, el despliegue de efectivos en la zona de conflicto en los últimos años no coincide con esta apreciación.
Este documento responde a los lineamientos establecidos en la sexta Cumbre de Ministros de Defensa de las Américas, realizada en Ecuador en noviembre pasado, en la que los países miembros se comprometieron a realizar un diagnóstico completo -conocido como libro blanco- sobre la situación interna de los ejércitos del continente, además de las amenazas internas y externas en cada país. En este documento el Ejército Mexicano no tomó en cuenta la situación que tiene que ver con el levantamiento armado del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN).
En el apartado denominado Seguridad y defensa, ''factor estratégico'', el libro indica que ''la extensión de las franjas fronterizas representa un foco especial de atención para las fuerzas armadas, cuyo esfuerzo está orientado a coadyuvar con las autoridades civiles en el mantenimiento de la seguridad interior, particularmente en la aplicación de la Ley de Armas de Fuego y Explosivos, donde se requiere de una gran movilidad y un despliegue efectivo para el cumplimiento de estas tareas''.
La línea fronteriza sur, señala, involucra los estados de Campeche, Tabasco, Quintana Roo y Chiapas, ''destacando por su afinidad cultural con Centroamérica y por una marcada desigualdad social en ambos lados, donde los temas de controversia y la problemática giran sobre migración y tráfico de personas, armas y enervantes''.
En este análisis, la Defensa Nacional detalla las zonas geográficas de importancia estratégica para el país: región peninsular californiana; istmo de Tehuantepec; península de Yucatán; porción centro (estado de México, Querétaro, Guanajuato, Michoacán, Morelos, Hidalgo y Puebla); Distrito Federal y sureste (Chiapas y Tabasco).
En el caso de los estados de Chiapas y Tabasco, el documento señala que ''su ubicación geográfica representa para el resto del país un sinnúmero de ventajas, al contar con litorales tanto en el Pacífico como en el Golfo de México, vastos recursos naturales renovables y no renovables y gran cantidad de instalaciones de explotación, tratamiento y producción de energéticos''.
El alto mando del Ejército tampoco identifica en dicho apartado al movimiento zapatista como parte de ''las nuevas preocupaciones, amenazas y nuevos desafíos''. Entre éstos destacan: tráfico mundial de drogas y armas; terrorismo internacional; delincuencia organizada transnacional; corrupción y lavado de dinero, así como pobreza extrema y exclusión social de amplios sectores de la sociedad, que también afectan la estabilidad y la democracia, porque ''la pobreza extrema erosiona la cohesión social y vulnera la seguridad de los Estados'', además de desastres naturales, enfermedades como el sida, y ataques cibernéticos.
En este documento, el primero en su tipo que elabora el Ejército Mexicano, se destaca la lucha contra el narcotráfico -considerado por este gobierno el principal asunto de seguridad nacional- y se ofrecen cifras que fueron dadas a conocer con anterioridad.
La Defensa Nacional, en su libro blanco -que también tiene como destinatarios a ''nuestros vecinos estratégicos, estados amigos y demás entidades sociales y políticas''- menciona que el documento busca ''mostrar y acrecentar el conocimiento del Ejército y Fuerza Aérea mexicanos, lo que les permitirá dilucidar las razones de nuestro comportamiento en el plano nacional e internacional, situación que fortalecerá las ya sólidas y fraternales relaciones entre instituciones armadas''.
El documento, elaborado en papel de primera calidad, con fotos y gráficas a color, no refleja la importancia que en los hechos la Secretaría de la Defensa Nacional ha conferido al estado de Chiapas y a la zona de conflicto.
De acuerdo con información oficial, la séptima Región Militar (RM) -que abarca Chiapas y Tabasco- es la única del país que cuenta con tres zonas militares (ZM) en una sola entidad (31 en Rancho Nuevo, 36 en Tapachula y 39 en Pueblo Nuevo, Chiapas), además de 30 en Villahermosa y 38 en Tenosique, Tabasco.
Cabe señalar que sólo hay dos regiones militares con cinco o más zonas. La primera, que abarca los estados de Hidalgo, México, Morelos y el Distrito Federal, y la quinta, que incluye Jalisco, Zacatecas, Nayarit, Aguascalientes y Colima.
Según información de la Defensa Nacional, en la séptima Región Militar están acantonados oficialmente 17 mil efectivos, los cuales representan casi el mismo número de soldados (18 mil) dedicados a la destrucción de plantíos de drogas a nivel nacional, y más de los 12 mil que participan la detección e intercepción de droga y en labores de inteligencia militar para combatir el problema principal de seguridad nacional que enfrenta el país.
Oficialmente la Defensa Nacional reconoce que de 2000 a la fecha 92 soldados han muerto por diversas razones en Chiapas, de un total de mil 10 efectivos en el mismo periodo a nivel nacional.
Durante el sexenio foxista, 4 mil 481 soldados que estaban acantonados en Chiapas desertaron del Ejército Mexicano, aunque esta cifra representa un porcentaje menor al de 100 mil militares que dejaron el instituto armado en ese lapso a nivel nacional.