Comité ciudadano exige a gobiernos estatal y municipal justificar obras y revelar costos

Firme, la restauración del centro de Oaxaca; concluirá a mediados de julio: autoridades

Autoridades: el proyecto paisajístico tiene el aval de INAH y UNESCO; descartan daños al patrimonio cultural

Muestra preocupación por negativa de encargados a sanear y conservar árboles

VICTOR RUIZ ARRAZOLA CORRESPONSAL

Oaxaca, 0ax., 26 de junio. El director del Instituto del Patrimonio Cultural de Oaxaca, Carlos Melgoza Castillo, dependiente del gobierno estatal, informó que el Proyecto Paisajístico del Centro Histórico de esta ciudad ya recibió el aval técnico del Instituto Nacional de Antropología e Historia, así como del Consejo Mundial de Monumentos y Sitios (Icomos) -organismo asesor de la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO)-, por lo que los trabajos continuarán y se estima concluir la remodelación a mediados de julio, antes de las fiestas de la Guelaguetza.

El funcionario sostuvo que el proyecto de remodelación del zócalo ya fue objeto de supervisión técnica ante las inquietudes de la ciudadanía oaxaqueña, de acuerdo con las instrucciones del gobernador Ulises Ruiz Ortiz, pero de esa supervisión "no se desprendió ninguna anomalía". Expuso que en el diseño participaron representantes de la sociedad civil como el pintor Luis Zárate, el director del Jardín Etnobotánico, Alejandro de Avila, y Saúl Alcántara, arquitecto y paisajista.

En tanto, el pintor Luis Zárate explicó ante miembros del Patronato Pro Defensa y Conservación del Patrimonio Natural y Cultural del Estado de Oaxaca (Pro-Oax), que el proyecto paisajístico fue estructurado con las propuestas tanto del Instituto del Patrimonio Cultural de Oaxaca y de expertos en paisajismo urbano como De Avila y Alcántara y la suya propia, por lo que se llegó a una idea integral, con la finalidad de evitar de que no se dañe el patrimonio cultural de los oaxaqueños.

Dijo que se acercó al Instituto del Patrimonio Cultural de Oaxaca, cuando se enteró de que se elaboraba un plan para remodelar el centro histórico de la capital "para opinar como parte de la sociedad civil y de forma gratuita".

En el patio del Museo de Arte Contemporáneo de Oaxaca (Maco), al referirse al cambio de la vegetación que se encuentra en el centro histórico, dijo que el proyecto en ningún momento contempla eliminarla para sembrar otras especies.

Se busca sembrar especies nativas en las áreas vacías. Se prevé sembrar cuatro "coquitos" en los cuatro puntos del atrio de la Catedral, donde actualmente no hay vegetación.

Reconoció que los laureles de la India -árboles de gran copa- no tienen relación alguna con la flora del territorio oaxaqueño, pues fueron traídos a finales del siglo XIX y sembrados en sitios como la actual Alameda de León y el zócalo de la ciudad.

Expuso que estos árboles se deben cuidar para evitar que mueran, pero cuando esto suceda, por alguna razón natural, se sustituirán, según el proyecto paisajístico, por higos del valle, que se parecen a los laureles de la India en lo frondoso de sus copas, pero son endémicos.

Añadió que los trabajos que se realizan en el zócalo de la ciudad de Oaxaca forman parte de este proyecto paisajístico en el que también estarán incluidos el atrio de la catedral, la Alameda de León y un jardín que se construye a un costado de la catedral, en la calle de Independencia, en un área que hasta hace unos meses era usada como estacionamiento de vehículos de la Procuraduría General de la República.

Javier Villalobos Jaramillo, presidente de Icomos en México, en una visita a Oaxaca para conocer las obras del centro histórico reconoció que se realizan conforme a la normatividad de la UNESCO, debido a que este centro histórico es Patrimonio Cultural de la Humanidad desde hace mas de 15 años.

Luego de que en abril pasado comenzaron las obras de remodelación y dos laureles de la India resultaron dañados, se integró un Comité de Vigilancia Ciudadana que durante las últimas semanas ha manifestado inconformidad con los trabajos, al señalar a las instancias gubernamentales como las responsables de la caída de esos árboles.

VICTOR RUIZ ARRAZOLA CORRESPONSAL

Oaxaca, Oax., 26 de junio. Los integrantes del Comité de Vigilancia Ciudadana que se integró en abril pasado para protestar por la caída de un laurel de la India en el zócalo de la ciudad de Oaxaca determinaron que su función se concretará al cuidado de los árboles del centro histórico, luego de que los gobiernos estatal y municipal se han negado a proporcionarles información sobre las obras de remodelación que se realizan en la zona.

Marieta Bernstorff, Claudia Turrent y Alejandro D'Acosta, miembros de este comité, en entrevista con La Jornada, manifestaron preocupación por la "negligencia de los funcionarios" encargados de las obras, al negarse a realizar los trabajos de saneamiento y conservación de los árboles del zócalo de la ciudad, de acuerdo con las indicaciones de especialistas,

D'Acosta, arquitecto de profesión, expuso su interés por conocer al asesor del gobernador Ulises Ruiz Ortiz, responsable de que se haya tomado la determinación de modificar un espacio "que funcionaba y muy bien", como es el zócalo.

Dijo que hasta el momento, las autoridades estatales y municipales encargadas de las obras no han justificado la decisión de cambiar el zócalo, "no han dicho por qué decidieron remodelarlo, y más, cuando, en la administración pasada se le invirtieron varios millones de pesos para darle mantenimiento".

Manifestó que en materia de remodelación y restauración es sumamente difícil comprobar inversiones; quizá por ello el Instituto del Patrimonio Cultural del Estado de Oaxaca "no ha informado con detalle cuántos millones de pesos se invertirán en el zócalo, sólo ha dicho que son 800 millones de pesos para todo el centro histórico, pero son obras que la ciudadanía no considera prioritarias".

Cuestionó que se invirtieron recursos públicos en la remodelación del palacio de gobierno, que después será destinado a museo; la ex casa de gobierno se remodela para destinarla a hotel-escuela; al ex recinto legislativo también se le invierte dinero para acondicionarlo como teatro, mientras en las colonias populares miles de familias se encuentran sin agua potable, alumbrado público y drenaje.

Sostuvo que el zócalo de la ciudad, "es lugar especial en el mundo, porque allí se reúnen personas de diversas clases sociales; es un centro de reunión de la memoria colectiva".

Dedicada a organizar recurridos por el estado, con turistas estadunidenses y europeos, Marieta Bernstorff expuso que los extranjeros vienen a Oaxaca a conocer el maravilloso zócalo, con sus enormes árboles y su gente, por la convivencia que se da en ese espacio; "no vienen a ver una ciudad moderna, con puentes a desnivel y con jardines sofisticados, con vehículos, porque para eso mejor se pagan un viaje a Nueva York o París".

Turrent dijo que ante la negativa del INAH a proporcionar al comité un especialista en árboles que realizara un diagnóstico de las condiciones en que se encuentra la flora del zócalo de Oaxaca, solicitaron apoyo de instancias de la UNAM, de donde se comisionó a un arbolista que la semana pasada realizó un estudio y en los próximos días entregará los resultados.

Hizo mención de que afortunadamente la salud de varios árboles es buena: "eso es lo que queremos saber, no estamos obstinados en decir que todo lo que se está haciendo en el zócalo está mal, queremos que las cosas se hagan bien, que se consulte a la ciudadanía qué se está haciendo, por qué y cuánto costará, pues al final de cuentas es dinero público el que se está invirtiendo".

El Comité de Vigilancia Ciudadana del Zócalo de la ciudad de Oaxaca determinó concretar sus esfuerzos para generar un proyecto de restauración de los árboles; "el aspecto de la piedra que utilizarán en los trabajos de remodelación, el nivel del piso será responsabilidad de otro grupo de ciudadanos vigilar", afirmó.

Estos ciudadanos que reconocieron no ser nativos de Oaxaca, pero vivir en esta ciudad desde hace muchos años, coincidieron en que, a consecuencia de la caída de dos laureles de la India en el zócalo de la ciudad de Oaxaca, pudieron conocerse e integrarse en un equipo de trabajo "por un objetivo común, procurar la conservación del medio ambiente para nuestros hijos, a los cuales decidimos traer a vivir a Oaxaca".