Miembros del FPFV-I amenazan con enfrentar a la fuerza pública

Tensión en Tláhuac ante el inminente desalojo del predio Las Calabazas

Anoche, líderes de la agrupación mantenían conversaciones con autoridades del DF

MIRNA SERVIN

Ante la amenaza de desalojo de alrededor de mil familias pertenecientes al Frente Popular Francisco Villa-Independiente (FPFV-I) que invadieron de manera irregular el predio Las Calabazas, en la delegación Tláhuac, los propios integrantes de esa organización quemaron las viviendas del campamento improvisado.

Alrededor de las 8:30 de la mañana, cerca de 200 elementos del agrupamiento a caballo y 600 granaderos y elementos de Fuerza de Tarea de la Secretaría de Seguridad Pública del DF reforzaron la vigilancia, que desde el domingo pasado se mantenía en dicho predio, ubicado en la colonia Zapotitla, de esa delegación.

Ello, debido a que las más de mil familias del FPFV-I continuaban ocupando el terreno de manera irregular, con casas improvisadas de plástico y cartón, aun cuando esa zona es considerada de reserva ecológica.

De acuerdo con las autoridades delegacionales, la invasión empezó el 4 de junio pasado, cuando alrededor de 200 familias se instalaron en dicho lugar. En esa ocasión elementos de la Secretaría de Seguridad Pública del DF resguardaron el predio y los integrantes FPFV-I decidieron retirase.

No obstante, al paso de los días volvieron a instalar algunas pequeñas construcciones, hasta que el domingo pasado se desplegaron alrededor de 2 mil personas de esa organización. Ese grupo es una escisión del Frente Popular Francisco Villa "original", como sus mismos integrantes lo definen.

Al mediodía de ayer, los integrantes del FPFV-I se atrincheraron en los límites del predio, que colinda con la delegación Iztapalapa, para hacer frente al inminente desalojo. Sus armas eran bombas molotov, palos y piedras, con las que amenazaron a los policías en caso de que pretendieran entrar a la zona y derribar las construcciones irregulares.

Más tarde una comisión de miembros de esa organización se trasladó a las oficinas del gobierno capitalino, en el Zócalo, con la demanda de construir parques, escuelas y un deportivo en ese terreno de más de dos hectáreas. No obstante, algunos miembros de la agrupación reconocieron que la verdadera intención es contar con un espacio para construir viviendas de manera definitiva, o por lo menos presionar a las autoridades delegacionales para regularizar el predio aledaño, denominado Degollado, que fue ocupado por el Frente Popular Francisco Villa hace 10 años.

En espera del resultado de las pláticas de sus líderes con las autoridades capitalinas, los ocupantes del campamento bajaron de las faldas del cerro cercano para ocupar nuevamente el predio.

La situación dividió a los pobladores de la colonia Zapotitla. Mientras algunos reconocen que el predio no pertenece al FPFV-I y por tanto su ocupación es ilegal, otros lamentaron el alto precio que tienen que pagar por la renta de una vivienda. Durante la tarde hubo gran afluencia de vecinos, y la tensión ante la posible entrada de la policía aumentó alrededor de las 8 de la noche, cuando camiones de granaderos y patrullas se empezaron a desplegar en la zona. Además, la policía colocó dos grandes lámparas para iluminar el predio, lo que aumentó el temor de la entrada de los elementos policiacos, luego de que las negociaciones de sus líderes hubieran fallado.

Hasta el cierre de esta edición no se conocía el resultado de las negociaciones entre autoridades del gobierno central y los líderes de esa organización, y el predio era resguardado por la fuerza pública.