El acuerdo internacional incluye 11 acciones para reducir la delincuencia en el área
Signan protocolo de seguridad los gobernadores de Sonora y Arizona
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Veh�lo de la Patrulla Fronteriza, de guardia junto a la l�a divisoria FOTO Eduardo Jaramillo /Notimex
Tucson, Arizona, 18 de junio. Los gobernadores de Sonora y Arizona, Eduardo Bours Castelo y Janet Napolitano, respectivamente, firmaron hoy aquí un protocolo para convertir a esta región en la más segura de Estados Unidos y México, ante los pocos esfuerzos que los gobiernos federales de ambos países han hecho para combatir la inseguridad que priva en la frontera.
Ambos mandatarios reconocieron que las administraciones de Vicente Fox y George W. Bush no han invertido los recursos suficientes en la frontera para resolver el problema de inseguridad que ha desatado la presencia del crimen organizado y que en la actualidad representa un grave problema para las dos naciones.
El anuncio del protocolo de seguridad fue hecho por Janet Napolitano durante su intervención en la clausura de los trabajos de la sesión plenaria de la comisión Sonora-Arizona, que durante los últimos tres días se llevó a cabo en esta ciudad, en la cual participó el secretario de Relaciones Exteriores, Luis Ernesto Derbez.
En conferencia de prensa, ambos gobernadores explicaron que dicho acuerdo binacional está integrado por 11 acciones, entre las que destacan la elaboración de una ruta crítica que permita establecer parámetros en el caso de un potencial ingreso de terroristas por esta región fronteriza y un plan de contingencia contra desastres naturales.
Por su parte, Bours Castelo manifestó que la problemática en la frontera de Sonora es similar a la que se vive en Tamaulipas, debido a que no existe el "suficiente apoyo" de parte de la administración del presidente Vicente Fox para combatir el clima de inseguridad que han generado los enfrentamientos entre bandas de narcotraficantes.
"Requerimos de los esfuerzos de los dos gobiernos para contrarrestar los índices de violencia y garantizar la tranquilidad de los habitantes de ambos lados de la frontera, porque los narcotraficantes y polleros han empezado a radicalizar sus posiciones", agregó el sonorense.
Asimismo, criticó que los gobiernos de México y Estados Unidos se hayan limitado a negociar un acuerdo migratorio como medida para resolver en definitiva el problema de la migración ilegal. "No podemos tener una visión de corto plazo con permisos temporales. No concibo que esa sea la solución, pues sería una decisión muy pobre", señaló.
Alerta por tráfico de órganos y explotación sexual de niños
La presidenta del Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) en Sonora, Lourdes Laborín de Bours, alertó hoy a las autoridades de ambos lados de la frontera sobre el riesgo de tráfico de órganos y la explotación sexual y comercial a que están expuestos los niños y niñas migrantes que cruzan solos la frontera.
Al exponer el programa oficial Camino a Casa -durante su participación en la sesión plenaria de la Comisión Sonora-Arizona-, el cual está encaminado a proteger la integridad de la población infantil repatriada, informó que tan sólo el año pasado, más de 39 mil 600 niños mexicanos fueron deportados, de los cuales al menos 20 mil llegaron por la franja fronteriza entre Sonora y Arizona.
"No estamos a favor de la ilegalidad, y entendemos que Estados Unidos defienda sus fronteras, está en su derecho, pero hay maneras de hacerlo, y éstas siempre deben ser respetando la dignidad de las personas, sobre todo, la de los niños", dijo la esposa del gobernador de Sonora, Eduardo Bours Castelo.