Lo nuevo de John Adams
Lo más reciente de la producción de los virtuosos del minimalismo no es precisamente una obra minimal. El maestro John Adams (1947) recibió el encargo de la Filarmónica de Nueva York y el Lincoln Center de escribir una partitura en memoria de las víctimas de la tragedia del 11 de septiembre de 2001 en las Torres Gemelas.
El resultado fue grabado recientemente por esa orquesta, dirigida por Lorin Maazel, y ahora llega a México ese disco, On the transmigration of souls (Nonesuch Records). Se trata de una partitura plena de hibridismo, ideas originales combinadas con la muy en boga obsesión de lo que se ha dado en llamar ''paisajes sonoros", que consiste en hacer ''tomas" directas de ruidos de la calle, voces, ambientes, sonidos domésticos o cotidianos para incorporarlos a un discurso sonoro cuya fluidez, densidad y valor dependen de las capacidades creativas del autor.
En este caso, en tratándose de uno de los grandes maestros de la música de Estados Unidos, heredero de quienes ha elegido como sus maestros: Leonard Bernstein, Georges Gershwin, Aaron Copland y Charles Ives, hace un planteamiento estético valedero, aunque el resultado no convenza a plenitud dado que lo programático y el espíritu de la pieza lo atan a una circunstancia entre el nacionalismo y el dramatismo.
La inteligencia de Adams, que no en vano es homónimo del segundo presidente en la historia de su país y cuyo interés por los temas sociales está plasmado en óperas anteriores como Nixon en China y El Niño (en alusión al fenómeno meteorológico) separa oportunamente la naturaleza de ese hecho histórico en cuanto a su significado para los gobernantes de su país y se dirige en cambio directamente a los seres humanos que padecieron en carne propia ese episodio oscuro de la historia reciente de la humanidad, donde precisamente el presidente de Estados Unidos y sus socios en la industria de la guerra han quedado ya marcados como los principales sospechosos, por la demostración de complicidad con el tal Bin Laden y, sobre todo, porque se han visto beneficiados de ese crimen de lesa humanidad.
Vean si no el estado actual de las cosas: un nuevo ''orden mundial" marcado por el entronizamiento de la ultraderecha en el mundo. Si bien la nueva obra de Adams no convence, habrá que revisitar sus obras maestras anteriores y esperar el estreno de su nueva ópera, cuyo nombre también lo dice todo: Dr. Atomic, que ocurrirá el primero de octubre en la Opera de San Francisco.