El máximo poder de la música minimal
Una de las improntas de la música contemporánea reside en la vasta producción del maestro californiano Terry Riley, reconocido como el fundador, teórico, profundizador y animador de ese gran movimiento estético conocido como minimalismo, si bien su colega Lamonte Young había desarrollado antes, en las postrimerías de los años 50, en la Universidad de California en Berkeley, los conceptos esenciales de la también llamada música repetitiva.
Una manera de describir este concepto consiste en delinear el trazo de frases sonoras expandidas al infinito y un efecto de tiempo musical eterno con un mínimo de sonido.
La influencia de Riley marca buena parte de la producción de la música concebida desde la década de los 60 hasta la fecha. Con el joven Young (je), el risueño Riley fundó el Theater of Eternal Music, donde figuró otra leyenda viva: el maestrísimo John Cale, antiguo integrante de Velvet Underground y compañero de ruta de Lou Reed, David Bowie y Andy Warhol.
Entre las muchas maneras de describir el genio y la leyenda de Terry Riley figura una anécdota seminal de la cultura del rock: cuenta la leyenda que Pete Townshend, Roger Daltrey, Keith Moon y John Entwistle, integrantes del grupo The Who (aunque otra versión presenta a Townshend solo en tal sesión hipersicodélica de contracultura) pasaron una noche entera escuchando una y otra y otra vez una obra clásica entre las clásicas: En Do, que constituye un hito comparable a la sonrisa de la Mona Lisa.
Profundamente elevado, el jefe Townshend tomó por la mañana el teléfono y localizó quién sabe cómo al autor de esa partitura tan honda y alta. Le dijo todas las linduras que uno puede decirle a un genio cuando tiene el privilegio de dirigirse a él. El resultado es el track inicial, titulado a manera de homenaje Baba O'Riley, de otro disco clásico: Who's Next, a la salud de las barbas con trenza y a la melena con trenza y al pensamiento sonoro entrepiernado del maestro Riley, leyenda viva que en varias ocasiones ha visitado México con su música -en una de ellas concedió una entrevista a La Jornada- la más reciente fue en 2002 con un recital alucinado en la Sala de Conciertos Nezahualcóyotl, acompañado en un programa titulado Night Ragas, por el contrabajista italiano Stefano Scodanibbio.
La noticia ahora es que vuelve a circular entre las novedades discográficas una versión de En Do, protagonizada por el mismísimo Terry Riley en el sax y un conjunto instrumental de ensueño. Se titula precisamente En Do (discos CBS), y es un viaje mágico y misterioso por la música más honda y elevada. Una alucinación en estado consciente.
Pablo Espinosa