Conferencia magistral de Alain Touraine, a quien rinden homenaje en la UNAM
La democracia en México ''no es activa en la parte superior, pero sí en barrios y pueblos''
El sociólogo francés Alain Touraine afirmó que la democracia en México ''no es firme en la parte superior, pero es sumamente activa en la parte inferior: en los barrios, pueblos, universidades, grupos religiosos, étnicos, sociales y políticos", aunque advirtió que existen dificultades en el sistema político mexicano.
Al dictar la conferencia magistral América Latina en el nuevo paradigma del mundo contemporáneo, en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), advirtió que los países de la región están lejos de haber construido espacios políticos sólidos.
Hoy, el éxito de mayor importancia es Brasil, donde la democracia no había tenido raíces fuertes y el proceso de distensión y después la apertura del sistema autoritario dio resultados frágiles y mediocres, sostuvo.
En relación con México, dijo que ''ha decidido romper con la tradición antidemocrática del partido único y realizar una reforma política. No obstante, hasta la fecha no se ha creado un sistema estable de separación entre la mayoría y la minoría. Ojalá se resuelva este problema", añadió.
Sin embargo, expresó que la fortaleza intelectual de este país es ''impresionante". México es ''uno de los más vitales en el mundo, y cuando se acabe el estancamiento en la cumbre, seguramente su creatividad vivirá un auge rápido".
En el contexto de los 75 años del Instituto de Investigaciones Sociales de la UNAM, en el que se rindió homenaje a Touraine, éste consideró que el problema más visible y dramático en muchos países es la expulsión o la represión de los grupos y las culturas indígenas.
Los fracasos han sido más numerosos y graves que los éxitos en este ámbito, advirtió. Sin embargo, hay que entender lo valioso de los movimientos de defensa de los pueblos indios. Basta mencionar el caso más conocido, los pueblos mayas de la Selva Lacandona, en Chiapas, destacó.
Dijo que es difícil negar la presencia de una transformación radical del pensamiento y de la acción colectiva en este continente. Mediante iniciativas e ideologías, aparentemente limitadas, se ve la participación activa y autónoma de América Latina, de los cambios más amplios y profundos que se observan a escala mundial.
Expresó que Latinoamérica participa en las grandes modificaciones de la realidad y de las ideas sociales: ''Es imposible entender los cambios fundamentales del planeta sin tomar en cuenta los fenómenos nuevos que aparecen en la región", y que implican para todo el mundo una variante de las categorías del estudio y del hecho, estableció.