ANDANZAS
Mark Godden en la Compañía Nacional de Danza
ABIERTA A NUEVAS tendencias, definitivamente, la Compañía Nacional de Danza (CND) del Instituto Nacional de Bellas Artes, dirigida por el maestro Dariusz Blajer, incluye en su temporada de junio la presencia del coreógrafo canadiense Mark Godden, en un nuevo intento por ampliar y diversificar modernos conceptos, enfoques y estructura del fenómeno estético en el ballet llamado clásico.
LAS PRESENTACIONES DE la Compañía Nacional los días 7, 9 y 12 de junio, en el Palacio de Bellas Artes, son testimonio de la ya sólida tendencia en el mundo del ballet por ampliar un espectáculo que libera la estructura académica tradicional de la escuela clásica del ballet de rancio abolengo, fruto de más de 200 años de perfeccionamiento técnico, como lo hemos corroborado en los bailarines del Kirov, el Bolshoi, la Scala de Milán, la Opera de París, etcétera, grandes compañías que mantienen impoluto en su repertorio la tradición de las grandes obras inmortales de la saga italo-francesa-rusa-estadunidense, y otras que han conservado esta pureza y rigor.
LA TAREA NO es fácil, pero sí inminente, ante el gran empuje de un nuevo mundo que reclama la traducción de nuevas interpretaciones de las pasiones y la problemática de sociedades cada vez más estresadas, competitivas y deshumanizadas, donde los artistas parecen ser la punta de lanza para mostrar al público la nueva realidad.
ASI, MARK GODDEN, luego de su experiencia con el Royal Winnipeg Ballet de Canadá, se revela como uno de los coreógrafos contemporáneos que experimenta decididamente con las bailarines en sus obras; una tendencia, especie de puente entre la danza contemporánea y el ballet, para encontrar nuevas formas corporales en tiempo, espacio y movimiento, en estrecha relación con la luz y la sombra.
PARA ELLO SE sirve en su obra Miroirs, de la atmósfera musical de Ravel, uno de los impresionistas más afortunados y geniales de este periodo que parece dibujar sutilmente los estados del alma. Asimismo, sostiene que actualmente existe una gran fusión de las mencionadas técnicas en las compañías de danza y ballet del mundo y, como él mismo lo hace, los bailarines, por lo general son seleccionados por su adptabilidad y comprensión de las diversas dinámicas de la danza, ya sea contemporánea, clásica o neoclásica. Este es un viejo sueño que parece aún no cuaja en el bagaje de muchos profesores, quienes son los encargados de poner al día a los alumnos y prepararlos para las realidades y tendencias de un nuevo siglo, técnica y creativamente, poniendo simplemente a su alcance, sin pragmatismos, la gama de opciones, tendencias, cambios y situaciones que ofrece el somero análisis de los tiempos.
ASIMISMO, EL COREOGRAFO mexicano Antonio Salinas, con personalísimas características en esta pauta, estrenará su obra Aeropuerto, resultante de su tendencia hacia espectáculos unipersonales, en los que mezcla técnicas y códigos teatrales, corporales y balletísticos, dando vida a objetos diversos a fin de construir su historia en un ámbito contemporáneo.
SIN DUDA ALGUNA, ambos coreógrafos han debido enfrentarse a los bailarines "clásicos" de la Compañía Nacional de Danza para el montaje de sus obras, aunque Mark Godden ya ha tenido la experiencia con ellos, en el interesante proceso de hacerlos bailar con otra técnica y lenguaje distinto. Sin embargo, sabemos que el talento y el conocimiento cabal del sentido de la danza va más allá de la forma, de modo que para los buenos entendedores y creadores no sólo es una experiencia aleccionadora, sino todo un reto que ya tiene historia con la utilización de grandes bailarines, como Nureyev, por coreógrafos contemporáneos, donde el nombre de Bejart brilla en este sentido, sin dejar de lado el Neederland Ballet, Human Steps, etcétera. En la modesta perspectiva que me corresponde, vale recordar que en la escuela nacional de arte de Cubanacán, en su sección de danza moderna contemporánea fundada por Waldeen, en los años 60, de la cual fui copartícipe y maestra, no hubo ninguna objeción en que en mis clases se incluyera a Clara Carranco, como maestra de ballet, y a Jorge Berroa, músico y compositor, conmigo en el desarrollo de la improvisación y la creatividad.
ESTO SE MENCIONA lateralmente porque la tendencia es más que antigua, de hecho, la gran mayoría de los intérpretes de Merce Cunningham, o Twyla Tharp, y desde entonces de los más importantes coreógrafos del "ropimiento", tienen en sus filas a bailarines de sólida formación clásica.
REALMENTE LO IMPORTANTE es el talento, la sinceridad y capacidad, el prisma finísimo con que se siente y observa el mundo, y la fluidez de traducción corporal y escénica en general. Las funciones son los días 7 y 9 de junio a las 20 horas, y el domingo 12 a las 17 horas. Sin duda es muy interesante. Vea otra propuesta de la CND.