Sigue pendiente su promesa de castigar a "peces gordos" de anteriores regímenes
Aspiraciones políticas de Barrio Terrazas, marcadas por los feminicidios en Juárez
Dejó dudas de sus destrezas de negociación al coordinar a panistas en San Lázaro
Ampliar la imagen Francisco Barrio asegura que est�costumbrado a ganar en todas las contiendas FOTO Jos�arlo Gonz�z
La carrera de Francisco Barrio Terrazas se ha caracterizado por la tibieza política, el fracaso legislativo y las promesas generalmente incumplidas. Como gobernador de Chihuahua minimizó los asesinatos contra mujeres en Ciudad Juárez con argumentos simplistas de que los feminicidios se cometían debido a la ropa "provocativa" que utilizaban las víctimas, y titubeó siempre para ordenar una exhaustiva investigación y encarar un problema que lacera a la sociedad de Chihuahua y a los mexicanos en general.
Como titular de la Secretaría de la Contraloría y Desarrollo Administrativo (Secodam), en el gabinete del presidente Vicente Fox, prometió castigar a "peces gordos" de las anteriores administraciones, pero incumplió su palabra durante sus tres años al frente de la dependencia (2000-2003), porque consideró que "la democracia respeta las garantías de los acusados". Nunca entregó datos que comprobaran el combate a la corrupción o informes sobre investigaciones por ilícitos cometidos durante los gobiernos de Carlos Salinas de Gortari y Ernesto Zedillo Ponce de León.
Su paso por la 59 Legislatura federal dejó más dudas sobre su destreza política, pues no demostró un verdadero control de la fracción del Partido Acción Nacional (PAN) en la Cámara de Diputados, que encabezaba. Uno de los pocos recuerdos de los legisladores sobre el trabajo legislativo de Barrio Terrazas fue cuando se le ocurrió "adoptar" el caso del presunto preso político cubano José Gabriel Ramón Castillo, como parte de una campaña, dijo en junio del 2004, contra el gobierno del presidente Fidel Castro.
La secuela de las muertas de Juárez
Las mujeres asesinadas en Ciudad Juárez son fantasmas que incomodan las aspiraciones políticas de Barrio Terrazas, quien se registrará los primeros días de julio para buscar la candidatura del PAN a la Presidencia de la República.
Los feminicidios en la ciudad fronteriza tuvieron un aumento alarmante en 1993, cuando Barrio Terrazas gobernaba la entidad, pero el panista poco hizo para enfrentar un problema que hoy parece incontrolable. Organismos de derechos humanos afirman que al entonces gobernador no sólo le tembló la mano para evitar más crímenes, sino que sostuvo sus argumentos simplistas de que los asesinatos "eran una situación natural", porque las víctimas caminaban por sitios oscuros y vestían de manera provocativa, con minifalda.
El entonces gobernador Francisco Barrio, quien también fue presidente municipal de Ciudad Juárez en el trienio 1983-1986, rechazó integrar una fiscalía especial para investigar los crímenes, porque consideraba inútiles esas instancias.
Barrio gobernaba en palacio, pero en las calles una red de complicidades de la delincuencia organizada se consolidaba, evidenciando la incapacidad del gobierno estatal.
En 1997, un año antes de que dejara la gubernatura, ocurrieron 27 asesinatos más. Las presiones sociales lo obligaron a crear una fiscalía en 1998, y nombró a María Antonieta Esparza como su titular. Pocos meses antes de abandonar el gobierno, la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) emitió una recomendación al respecto, en la que señalaba por primera vez la impunidad y la deficiencia en las investigaciones.
Al entonces gobernador no le interesaron las recomendaciones de la CNDH sobre los feminicidios, su ánimo se inclinaba ya por integrarse al equipo de campaña del que un año después sería candidato del PAN a la Presidencia de la República, Vicente Fox.
Su desacierto al no aceptar y enfrentar la grave situación de inseguridad que se padecía en Ciudad Juárez provocó que el tema se convirtiera en un verdadero obstáculo para su aspiración presidencial. Los feminicidios en Ciudad Juárez han llegado a tal magnitud que en mayo del presente año sumaban cerca de 350.
¿Y los peces gordos?
"Señor secretario, ¿y los peces gordos?", le preguntaron legisladores en septiembre de 2002 al entonces titular de la Secodam. La respuesta de Barrio Terrazas provocó un desorden mayúsculo en el pleno de la Cámara de Diputados: "En cuanto a que no hay todavía ningún servidor público que habiendo incurrido presuntamente en conductas ilícitas, esté en la cárcel, bueno, es porque estamos ahora en un entorno democrático en el que se respetan las garantías de los acusados, se respetan los tiempos de la ley y los procesos van avanzando y los procesos judiciales tienen sus propios tiempos".
Como titular de la Secodam no convenció. Muy al estilo foxista, Barrio Terrazas ejerció la administración con declaraciones "populacheras" en los medios de comunicación, a los cuales se filtraba información salida de la dependencia sobre supuestos procesos de corrupción. En una reunión privada con la Comisión de Vigilancia de la Contaduría Mayor de Hacienda de la Cámara de Diputados, realizada en junio de 2001, Francisco Barrio se tuvo que comprometer a sancionar a quienes "filtren" información.
No pudo contener la ira de los diputados priístas, quienes denunciaron una campaña permanente en medios contra miembros de su partido, pero sin que existiera ninguna prueba de corrupción. "Está utilizando su cargo público y la institución que preside para organizar una guerra política contra el PRI, pero no ofrece pruebas", repetían los del tricolor.
Como coordinador de la fracción parlamentaria del PAN en la 59 Legislatura, su trabajo fue endeble, la búsqueda de acuerdos políticos con otras fracciones no fue su fuerte. Prometió cambiar la forma de hacer política, pero no cumplió.
Creel débil, candidato perdedor
Francisco Barrio Terrazas tiene claro que de llegar a la Presidencia de la República su misión será contribuir a que el proyecto del PAN avance.
También tiene claro que Santiago Creel Miranda, ex secretario de Gobernación, sería un candidato "débil o suave". Reconoce en él a un "caballero", pero no valora su trabajo. En una entrevista dijo que a Creel se le valora por su pasado, cuando como titular de Gobernación tenía bajo su control a los diputados y senadores que hacían mayoría en las cámaras. Así, remató, cualquier mediocre saca acuerdos.
No le preocupa que su popularidad a escala nacional sea casi nula. No le quitan el sueño las encuestas que lo ubican sin ninguna oportunidad de triunfo. Francisco Barrio Terrazas afirma que se registrará como precandidato en julio, pues, explica, en otras ocasiones le ha tocado arrancar de abajo, y en todas ha ganado.