Usted está aquí: viernes 27 de mayo de 2005 Opinión CIUDAD PERDIDA

CIUDAD PERDIDA

Miguel Angel Velázquez

Los pasos errantes de Calderón

Precampaña fracasada

La Presidencia no, el GDF sí

¡AY, FELI-PILLO!, el más pequeño de todos los panistas. ¿Qué rumbo tomarán ahora tus pasos errantes?

EN LAS oficinas del Partido Acción Nacional, los estrategas azules hicieron notar a Felipe Calderón, por evidente, el fracaso de su precampaña por la candidatura a la Presidencia de la República. En las encuestas internas de esa organización política las posibilidades de Feli-pillo son nulas y, como siempre, no crece.

POR ELLO, en el PAN ya se da como un hecho que Calderón dejará para otro momento -que seguramente no llegará- sus aspiraciones por la candidatura a la Presidencia, y como premio de consolación "se le permitirá" competir por la de la jefatura de Gobierno del Distrito Federal.

POR ESO no es de extrañar que el ex funcionario de Fox, que luchó hasta la última gota de sudor por hacer realidad legal el IVA en alimentos -el sueño más preciado del neoliberalismo-, y humillado por las encuestas, doble la cabeza y acepte el destino que le impusieron sus correligionarios.

PERO EL otrora líder panista quiere convertir su nueva derrota en algo menos oprobioso, y con la rabia bullente por el descalabro anticipado, se lanzó en contra del Gobierno del Distrito Federal para tratar de situarse en la línea de arranque de la carrera por la Jefatura de Gobierno.

A ESO se debe, por ejemplo, que Feli-pillo se haya olvidado, casi por completo, del país, donde nadie lo considera un aspirante serio a la Presidencia de la República y por eso haya colocado sus baterías con la mira puesta en la capital.

PERO ESO no es suficiente para que Feli-pillo se muestre débil o arrasado frente a la gente de su partido, menos aún si tiene que reconocerlo ante sus antagonistas. Calderón, no obstante, se mira tal como es y como se siente frente al espejo de la amistad y a sus más cercanos seguidores no puede ocultar la verdad: "anda arrastrando la cobija y resignado a retirarse de la contienda" antes de que la paliza que le prometen las encuestas se convierta en realidad.

POR ESO el político michoacano busca la puerta de salida y quiere que se le reconozca como una opción para el DF, sobre todo si se tiene en cuenta que los azules no tienen a nadie de buenos tamaños para hacer frente al PRD en la ciudad de México.

LA CAPITAL, entonces, es la única vía que le queda a Feli-pillo para continuar con su carrera política, por eso busca de todas formas hacer que el jefe de Gobierno, Andrés Manuel López Obrador, se le enfrente, y para ello provoca y provoca sin tener respuesta de la contraparte.

Y LA no respuesta completa el cuadro de su fracaso político y eso lo tiene mal, muy mal, tanto que muchos panistas que lo tenían por hombre serio ahora le huyen, entre otras cosas porque ya empiezan a dudar de su salud mental, que en el PAN parece un mal endémico.

LO MALO es que Feli-pillo sabe, como comentan sus correligionarios, que el Distrito Federal para él, como para cualquier panista, es una misión imposible, porque si no lo aceptaron en muchas, si no es que en casi todas, plazas del país que ha visitado, en la capital, donde se le recuerda como un neoliberal furibundo, ya empieza a apestar.

SEA COMO sea, en el PAN no le han dejado ninguna otra opción a Felipe Calderón, alumno dilecto de Diego Fernández de Cevallos, y más tarde que temprano se hará el anuncio de su postulación por la candidatura al Gobierno del DF. Hacia allá van los pasos perdidos de Feli-pillo.

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