Usted está aquí: viernes 27 de mayo de 2005 Estados Acepta empresa de Hidalgo que emplea a "una menor"

La gerente de Rubie's asegura que cuenta con el aval del IMSS y de sus padres

Acepta empresa de Hidalgo que emplea a "una menor"

CARLOS CAMACHO CORRESPONSAL

Ampliar la imagen Trabajadoras de la f�ica Rubie� laboran, mientras m�de 100 contin�n paro FOTO Carlos Camacho

Tepeji del Río, Hgo. El conflicto laboral en la fábrica de disfraces y muñecos Rubie´s, acusada de explotar a menores de edad, ha provocado la semiparalización de sus actividades y dividido a sus 165 obreros, en su mayoría mujeres, pues una parte mantiene la lucha por sus derechos laborales y la otra continúa laborando.

A la entrada de la empresa un grupo lanza consignas contra los directivos, especialmente contra la gerente de planta, Delia Mendoza Martínez, a quien responsabilizan de la explotación de menores (14 y 16 años), y con mantas y pancartas azuza a quienes decidieron no participar en el movimiento.

Desde el pasado lunes, decenas de trabajadoras se plantaron en la entrada para insistir en sus denuncias, si bien el movimiento no ha contado con el apoyo total de la base trabajadora.

El Sindicato Progresista de Trabajadores de la Industria Textil, de la Manufactura, Corte y Confección, de la CROC, denuncia que la empresa explota a menores de edad, como a Teresita de Jesús Hernández Jiménez (15 años), Sergio Chávez Contreras (14), Carina Guadalupe Jiménez Alcántara (16) y Alicia Zarco (15).

Por su parte, la gerente reconoce que sólo Carina Guadalupe labora desde hace dos años en la empresa, pero con autorización del IMSS y de sus padres.

"Nos acusan de que explotamos a la gente, pero que me lo demuestren con pruebas", sostuvo, e indicó que el problema se originó por la disputa entre la CROC y la CTM por la titularidad del contrato de trabajo, que ostentaba la segunda.

La empresa se especializa en la confección de disfraces y ropa para muñecas, entre ellas las Barbies de Mattel, y opera actualmente a menos de la mitad de su capacidad (unas 30 personas que no se sumaron al movimiento).

Blanca Estela González Martínez, Sonia Robles Yánez, Ana María Herrera Mejía y María Elena Martínez se mantienen en sus máquinas y sostienen que sus compañeras no tienen razón en las protestas. "Aquí nos tratan bien, más bien se trata de personas conflictivas que no quieren trabajar", señalaron. El conflicto ya provocó la cancelación de pedidos de Nueva York, donde se corta la tela para ser confeccionada en la empresa.

 
Compartir la nota:

Puede compartir la nota con otros lectores usando los servicios de del.icio.us, Fresqui y menéame, o puede conocer si existe algún blog que esté haciendo referencia a la misma a través de Technorati.