Nada en el mundo tiene garantías completas, dice Sojo
Advierten analistas sobre riesgo de violencia en 2006
Analistas políticos advirtieron que existe riesgo de que la violencia del narcotráfico contamine las elecciones de 2006. Interrogado sobre estas advertencias, el coordinador de políticas públicas de la Presidencia de la República, Eduardo Sojo, señaló: "en ninguna parte del mundo se puede garantizar todo".
Al participar en el seminario México y los desafíos del cambio, Sojo llamó a la clase política a evitar la tentación de reinventar el país en 2006. Acerca de los riesgos de violencia, expresó: "en estabilidad hemos ganado mucho, pero lo peor es caer en exceso de confianza. Debemos hacer la tarea y en estabilidad hay tarea para los tres poderes de la Unión. El Ejecutivo no debe dejar vencimientos importantes de la deuda en 2006; debe aprovechar todas las oportunidades para refinanciar el déficit".
El Congreso de la Unión, agregó, debe aprobar un presupuesto para 2006 no sólo equilibrado, sino sin tantas controversias como este año, y los partidos políticos deben discutir y pelearse, pero dentro del marco institucional. "Todo esto es fundamental en materia de estabilidad", precisó.
-¿Está blindado el proceso electoral?
-Nada en el mundo tiene garantías completas. Lo que debemos hacer todos es adoptar las decisiones necesarias que están bajo nuestra responsabilidad para mitigar esos riesgos. Es necesario fortalecer las instituciones de seguridad, así como vigilar los gastos de campaña. Eso ya lo planteó el presidente Vicente Fox en diversas iniciativas enviadas al Congreso.
-¿Qué nos puede decir sobre la participación de narcotraficantes en los procesos electorales?
-Hay dos méritos: el de callar sobre lo que uno no sabe, y hablar de lo que uno sabe. Yo no sé en materia de seguridad y hoy quisiera callar.
El funcionario precisó que todas las experiencias exitosas que se conocen en el mundo tienen que ver con el orden.
"Hay que aprender de los errores y de los aciertos y no caer en el autoritarismo. Hay que respetar las leyes y, en materia económica, no dejar las cosas para las siguientes generaciones o endeudar al país en una proporción mayor. La inflación debe estar bajo control", precisó, y recomendó a los futuros gobiernos no dejar truncos programas como los relacionados con el Seguro Popular, el ahorro y la construcción de vivienda.
"En esos tres renglones el país tiene muchas posibilidades. El proyecto del Seguro Popular es llegar a 10 millones de mexicanos, y en este sexenio se cubrirá a 5 millones. En materia de ahorro popular tendremos 9 millones de cuentas, pero hay todavía muchas posibilidades."
En materia de vivienda, agregó Sojo, "podremos llegar a la construcción de 750 mil viviendas, pero el país da para más y se han reforzado instituciones como el Infonavit y el Fovissste, pero hay que pensar en quienes no están en esas dos instituciones".
En el seminario hubo un panel sobre el impacto económico de las corrientes migratorias, en el que participaron Pia Orrenius, Gustavo Mohar y Eduardo Levy. La primera, de la oficina ejecutiva del presidente de Estados Unidos, dijo a título personal que más de la mitad del crecimiento de la fuerza laboral de ese país corresponde a los migrantes.
Los ponentes señalaron que las remesas que se envían a México -este año sumarán entre 18 mil y 20 mil millones de dólares- no deben considerarse apoyo a la economía, porque la mayor parte sirve para paliar la pobreza y no se invierte.
Manifestaron que uno de los principales problemas es que los patrones de los indocumentados les retienen por lo menos 7 mil millones de dólares por seguridad social, pero los migrantes no reclaman ningún derecho por temor a ser repatriados.