Hay peligro nuclear, alerta
Acuerdo político con el Islam, plantea el IISS
Londres, 24 de mayo. Los gobiernos occidentales deben "acomodarse políticamente" con el Islam para contrarrestar la amenaza de grupos como Al Qaeda, del que no se descarta que pueda dotarse de armas nucleares, advirtió el Instituto para Estudios Estratégicos Internacionales (IISS).
Llamó la atención en contra de las medidas antiterroristas "duras", que en el mejor de los casos sólo pueden "contener" el auge del terrorismo en el mundo, por lo que resaltó un "mejor acomodo político de Occidente con el Islam con un ejercicio "moderado", flexible del poder, en vez de una aplicación "dura" del poder.
En su informe anual el IISS resaltó que la tradición de Estados Unidos de apoyarse en el "ejercicio duro" del poder ha arrojado resultados contrarios a lo que busca, lo que ha causado un aumento en el reclutamiento de terroristas.
Pero indicó que ahora cada vez más los países, incluyendo a Estados Unidos, comprenden la importancia de "moderarse".
El uso de ese poder más flexible podría eventualmente contribuir a la emergencia de "divisiones ideológicas" entre los integristas. Así, dijo, grupos como Jemaah Islamiah, de Indonesia, o el Frente Moro Islámico de Liberación, de Filipinas, con objetivos regionales limitados, podrían ser susceptible de influencias políticas que los podría llevar a abandonar el terrorismo.
Apoyo fundamentalista en Europa
El IISS señaló que Al Qaeda sigue siendo un grupo peligroso que encuentra apoyo entre musulmanes europeos, pues se alimenta del sentimiento antimusulmán de algunos países del área. Pero perdería el apoyo "si mejoran las condiciones para los musulmanes en Europa".
El instituto, con sede en Londres, no descartó que Al Qaeda podría dotarse de armas nucleares ante la "erosión" de controles atómicos internacionales como el Tratado de No Proliferación Nuclear, lo que podría provocar una "crisis de primer orden".
Al hablar sobre la posibilidad de "una catástrofe nuclear", llamó a Estados Unidos y Europa a volver a trabajar estrechamente y a buscar el diálogo con los países islámicos para quitarle apoyos a Al Qaeda.
Insistió sobre una "potencia nuclear Al Qaeda" como posibilidad si no se logra poner fin a las ambiciones nucleares de países como Irán y Corea del Norte.
En tanto, autoridades españolas arrestaron a tres marroquíes sospechosos de haber participado en el financiamiento de los atentados del 11 de marzo de 2004 en Madrid, que provocaron 191 muertos, detenciones que ocurrieron en Madrid y Granada.
Los hombres, vinculados con el tráfico de drogas y armas, fueron identificados como Mourad Bhar, de 20 años; Abdelkhalak Chergui, de 29, y Adelhak Chergui, de 32, hermano del segundo.
Las autoridades migratorias de Nicaragua, El Salvador, Honduras y Guatemala se declararon en alerta por mar, tierra y aire ante la "posible presencia" en la zona de dos presuntos terroristas de Al Qaeda.
Según los reportes, uno de ellos fue identificado como Ahmad Salim Swaydan, quien habría participado en un atentado contra la embajada de Estados Unidos, en 2002, en Tailandia. El otro sería un yemenita sólo identificado por el apellido Altuwaiti.