Plan de seguro hipotecario
Demanda Gil Díaz a aseguradoras evitar lavado de dinero
El secretario de Hacienda, Francisco Gil Díaz, hizo ayer un llamado a los dirigentes de la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS) para continuar trabajando y no permitir que ese sector sea utilizado para el lavado de dinero. Dijo que hasta ahora se han aplicado las disposiciones oficiales para no permitir esos ilícitos.
Anunció que ya se tiene un proyecto de Ley que se enviará al Congreso de la Unión en el próximo periodo ordinario de sesiones relacionado con el seguro hipotecario de garantía financiera. Estos seguros, explicó, permitirán construir la "arquitectura básica del mercado hipotecario.
Al clausurar la 15 convención de la AMIS planteó que de esa forma México logrará tener todas las instituciones necesarias para desarrollar un mercado hipotecario líquido y solvente, que permita a más mexicanos acceso a hipotecas para ser dueños de su vivienda.
Asimismo, con estas modificaciones legales, el sector participará como una pieza fundamental en este nuevo mercado de productos de seguro que son viables para el desarrollo del país.
El secretario de Hacienda explicó que el proyecto incorpora otras disposiciones que mejorarán el entorno regulatorio para que en 2006 se mantenga el dinamismo del sector. Para tal fin se deben hacer los ajustes a la regulación secundaria y hacer las inversiones necesarias.
En su breve discurso, Gil Díaz afirmó que la importancia del sector es incuestionable, porque los seguros juegan un papel crucial en el bienestar de la población, al permitir transferir los riesgos a que están expuestos los usuarios.
Robo de vehículos
Al término de la convención, el presidente de la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS), Rolando Vega informó que en el primer cuatrimestre de 2005 el número de vehículos robados en todo el país ascendió a 13 mil 962; de esta cifra 5 mil 125 se cometieron en el DF.
Dijo que 58.3 por ciento de los robos se efectuaron con violencia y en conferencia de prensa señaló que el valor de las unidades robadas en 2004 llegó a 3 mil 35 millones de pesos y en el primer trimestre del año el monto es de 936 millones de pesos.
Manifestó que las bandas que se dedican al robo de automóviles han perfeccionado sus operaciones y se calcula que después del ilícito, en sólo 18 horas la unidades puede estar en el mercado de Estados Unidos o Centroamérica, con documentos apócrifos. En 30 horas puede estar en la mitad del Atlántico, rumbo a Asia.
A pesar del incremento en el robo de automóviles, el costo de los seguros no se ha elevado y la perspectiva es que se mantenga, por la competencia que hay entre las empresas participantes en el mercado.
De los automóviles robados, sólo se recuperaron 6 mil 549. En el Distrito Federal fueron localizados 2 mil 757. A nivel nacional, agregó, la recuperación disminuyó de manera importante y en el caso de la capital de la República ya se iniciaron pláticas con el secretario de Seguridad Pública para actuar de manera coordinada.