Concierto de ¿despedida?
Pavarotti pierde credibilidad; lo tildan de mercader
Roma, 22 de mayo. La nueva larga despedida de uno de los cantantes líricos más populares del siglo XX, Luciano Pavarotti, deja un sabor amargo entre los melómanos, que acusan al tenor de haberse convertido en una suerte de mercader del bel canto.
Sus legendarios dos de pecho, sus magníficas interpretaciones de Verdi, su divismo natural -que le valieron las portadas de las más importantes revistas del mundo y la aclamación como el ''nuevo Caruso''- han pasado al olvido con conciertos en estadios y salas sin acústica para un público poco exigente.
El ''rey del agudo'', que cumplirá 70 años el próximo 12 de octubre, está perdiendo su carisma, según muchos expertos y críticos, para convertirse en un ''tenor globalizado''.
Pese a haber anunciado en numerosas ocasiones su inminente retiro, Pavarotti decidió realizar una gira de adiós por el mundo, iniciándola en América Latina (Venezuela y México), pasando por Europa, Estados Unidos y Australia, y concluyéndola, en diciembre de este año, en Hong Kong, Shanghai y Pekín.
No se descarta, sin embargo, que el periplo se extienda a 2006, lo que confirmarían las sospechas de que no existe la intención de cerrar una de las carreras más espectaculares de la lírica.
Luciano. mientras tanto, promete que al término de la gira enseñará canto y se dedicará a descubrir nuevos talentos.