Hay ''algunas posibilidades'' de que el juzgado octavo le dicte formal prisión
Hoy podría ser decretado auto de libertad al hijo de El Chapo Guzmán
El plazo vencía en la primera hora de este lunes
No puede ser enviado a un penal de máxima seguridad
Iván Archibaldo Guzmán Salazar, El Chapito -hijo del líder del cártel de Sinaloa, Joaquín El Chapo Guzmán Loera, y acusado por la Procuraduría General de la República de lavado de dinero- y sus abogados, confiaban en que un juez federal decretaría en las primeras horas de hoy un auto de libertad en su favor, lo que le permitiría abandonar el Reclusorio Preventivo Sur, donde se encuentra detenido desde la madrugada del pasado lunes.
Sin embargo, fuentes judiciales indicaron que había ''algunas posibilidades'' de que el juzgado octavo de distrito en materia penal librara el auto de formal prisión en contra de El Chapito.
Cabe aclarar que hasta la tarde de ayer aún no concluía en su totalidad el análisis del expediente del caso, por lo que será hasta este lunes cuando se dé a conocer el futuro jurídico del hijo de uno de los delincuentes más buscados en México y Estados Unidos.
El plazo de ley que tiene el juez octavo, Antonio González García, para definir si existen las pruebas suficientes contra el inculpado vence durante la primera hora de hoy.
Autoridades de la PGR consultadas, así como la defensa legal de Guzmán Salazar, dejaron en claro ayer que éste no podrá ser trasladado de manera inminente a un penal federal de ''máxima seguridad'', en caso de que quede sujeto a juicio penal, debido a que cuenta con una suspensión provisional de amparo.
En el supuesto de que El Chapito continúe encarcelado y sujeto a proceso, las dos únicas posibilidades de que sea cambiado de penal -posiblemente a uno con sede en Jalisco- son: primera, que el juzgado cuarto de amparo le niegue en los próximos días la suspensión definitiva, y que el juez de la causa (González García) se declare incompetente y turne el caso a un juez con sede en otra entidad. Segunda, que los abogados admitan que su cliente sea trasladado a otro centro penitenciario.
Ayer, en entrevista con La Jornada, el abogado Jorge Bussio, defensor de Iván Archibaldo Guzmán Salazar, aseguró que la única forma en que admitirán el traslado de su cliente es que las autoridades federales lo enviaran a otra cárcel que no fuera de máxima seguridad.
''En el supuesto de que se le dicte la formal prisión, y el juez se declare incompetente, estaríamos a la espera de que se enviara el caso a otro juez de Jalisco que no tuviera sede en el penal federal de Puente Grande, y entonces el cambio sería a otro reclusorio local; de otra forma no aceptaremos un traslado, por eso contamos con la suspensión'', puntualizó el litigante.
Agregó que ''jurídicamente no hay una sola prueba contundente'' en contra de su defendido, aunque precisó que si bien ''Archibaldo no ha cometido delito alguno, quizá el Estado le reprocha ser hijo de El Chapo Guzmán, pero eso no es delito''.
Refirió que originalmente la PGR le imputó la comisión de 18 delitos, de los cuales el juez González García sólo admitió uno (lavado de dinero). Explicó que la acusación por la que está detenido en el Reclusorio Sur se basa en el supuesto de que ''en virtud de que entran a su cuenta de cheques 470 mil dólares, y al día siguiente los saca en efectivo y los cambia por pesos, él lava dinero''.
Lo cierto, precisa, ''es que logramos acreditar que no eran 470 mil dólares, sino 522 mil pesos, producto de un seguro de coche que pagaron de un siniestro de un carro que le robaron a una familiar y ella le dio el cheque para que lo cambiara; esto sucedió hace dos años y, por si fuera poco, la Secretaría de Hacienda nunca presentó querella, porque evidentemente no se trató de una operación relevante, y ahora, que está detenido, curiosamente la presenta, por lo que prácticamente está prescrita la acción penal por lavado de dinero, porque ya no puede presentarse denuncia después de un año''.