Ratifica la convocatoria a una marcha para hoy
Evo Morales pide al presidente Mesa ordene la ocupación de pozos petroleros
La Paz, 15 de mayo. Evo Morales, el principal dirigente de la oposición en Bolivia, pidió hoy al gobierno de Carlos Mesa que ordene la ocupación de los pozos petroleros, sin expulsar a las trasnacionales, al tiempo que ratificó la convocatoria a una marcha este lunes en defensa de los hidrocarburos y en busca de una Asamblea Constituyente.
El líder del Movimiento al Socialismo (MAS), propuso a Mesa que tome "posesión física" de los campos petroleras, puesto que los contratos suscritos con las empresas fueron cuestionados por el Tribunal Constitucional, que dice que "son irregulares, por lo tanto ilegales e inconstitucionales".
Morales aclaró, en declaraciones radiales, que no solicita la expulsión de las petroleras del país, al considerar importante que se tengan "socios", y ratificó la convocatoria a la marcha del lunes, al pedir a la población que "nos movilicemos hasta que el Parlamento modifique esa ley (petrolera) y apruebe la Constituyente".
Junto al MAS, la Central Obrera Boliviana, y grupos campesinos, se unirán a la marcha la Federación de Juntas Vecinales de la ciudad de El Alto, y la Confederación Nacional de Indígenas y Originarios de Bolivia, entre otros sectores que defienden una fórmula aprobada en la Cámara de Diputados.
La ley petrolera surgió tras la aprobación de un referendo vinculante por el gas, en el que se estableció la posibilidad de incrementar hasta 50 por ciento los ingresos por concepto de regalías o impuestos a las trasnacionales.
Plasmada la fórmula en la ley, Mesa la consideró "suicida" para el país pues acabaría con las inversiones extranjeras. La norma fue criticada también por las multinacionales petroleras que amenazaron con juicios si la norma les obliga a cambiar los ventajosos contratos suscritos durante el primer gobierno del neoliberal Gonzalo Sánchez de Lozada (1993-97).
La semana pasada, el mandatario Mesa anunció "observaciones conceptuales" a la ley aprobada en Cámara de Diputados, que mantiene en 18 por ciento las regalías y eleva a 32 por ciento los impuestos, aunque la Constitución Política le obliga a entregar al Congreso objeciones específicas.
Su actitud ha provocado críticas de diversos sectores políticos. La precaria estabilidad del jefe de Estado llevó al analista independiente Jorge Lazarte, ex miembro del tribunal electoral, a afirmar que Mesa "ya está con un pie afuera" del gobierno.