Yeidckol Polevnsky despeja dudas a empresarios sobre gobiernos "populistas"
Incrementar a 15% gasto en inversión pública, promete Enrique Peña Nieto
La aspirante a la gubernatura mexiquense por el PRD planea construir segundos pisos
Ampliar la imagen Enrique Pe�en los municipios de m�pobreza del estado, Tlatlaya, Amatepec y Luvianos FOTO Agencia MVT
En caso de obtener la gubernatura del estado de México, Enrique Peña Nieto, candidato de la alianza PRI-PVEM, se comprometió a incrementar el gasto en inversión pública en por lo menos 15 por ciento del total de los recursos que ejerce el gobierno de la entidad, pues sólo de esta forma podrá dar respuesta a sus compromisos de campaña.
El gobierno estatal destina actualmente menos de 10 por ciento al gasto de inversión pública, ya que de los 83 mil millones que componen el presupuesto del gobierno local, sólo 6 mil millones se van a este rubro.
Durante una gira de trabajo por municipios del sur del estado, como Tlatlaya, Amatepec y Luvianos, considerados los de mayor marginalidad rural, Peña Nieto asumió el compromiso de construir una moderna carretera que comunique a Toluca con esa región, para detonar su desarrollo.
Por ser una región eminentemente agrícola, manifestó que pretende implementar un programa de asistencia técnica y de introducción de nueva tecnología para hacer más rentable el campo.
En cada mitin, al que acudieron en promedio mil personas, Peña Nieto pidió no dejarse engañar por ofertas irresponsables de otras expresiones políticas que luego, sostuvo, no cumplirán.
"Populismo es hablar mucho y cumplir poco, y de eso la derecha tiene mucho que decir", sostuvo por su parte la candidata de la coalición PRD y PT, Yeidckol Polevnsky, durante una reunión en Toluca con dirigentes del Consejo Coordinador Empresarial que le expresaron su preocupación por la instauración de un gobierno "populista" en la entidad.
La abanderada anunció allí que trabaja en proyectos para solucionar los conflictos viales que a diario enfrentan miles de habitantes de la zona conurbada al DF, por lo que de ganar los comicios del 3 de julio construirá segundos pisos, distribuidores viales e impulsará la introducción de líneas del Metro, tren ligero y transporte multimodal.
"Ya tenemos un equipo de expertos trabajando en esto, y una vez que concluyan los análisis daremos a conocer la propuesta de manera integral", dijo, aunque adelantó que ya cuenta con proyectos de segundos pisos para Tlalnepantla, Chalco y Naucalpan.
Señaló que para su gobierno será fundamental la colaboración del sector empresarial, no sólo para ayudar a combatir el problema del desempleo, sino por elevar la competitividad del estado de México.
El aspirante del PAN y Convergencia, Rubén Mendoza Ayala, provocó inconformidad entre jóvenes y sacerdotes de la Iglesia católica debido a que canceló de última hora dos actos que tenía con esos sectores.
Mendoza Ayala sostendría en Tepotzotlán un encuentro con párrocos. Después de dos horas de espera, el comité de campaña suspendió el encuentro. Trascendió que solamente llegaron cinco de los 100 párrocos invitados. Tampoco se presentó a San Antonio La Isla, donde repartiría flores a mujeres con motivo del Día de las Madres, celebrado un día antes.
Por la noche, en el paraje El Gallinero, de Cuautitlán Izcalli, el candidato panista, con el apoyo de la banda musical El Mexicano, logró reunir a unos 300 habitantes, sin la presencia de Marta Sahagún, cuya asistencia estaba programada.
Quien sí dio la cara fue el dirigente estatal panista, Francisco Gárate Chapa, quien en una conferencia de prensa efectuada en Naucalpan, denunció que el gobernador Arturo Montiel utiliza el programa Regionalización para justificar la entrega de 450 toneladas de materiales de construcción para supuestas obras públicas en 10 municipios del norte de la entidad, para fortalecer la campaña de la alianza PRI-PVEM.
En la zona norte de Nezahualcóyotl, donde el PRI había anunciado que 2 mil perredistas renunciarían a su militancia para incorporarse al tricolor, sólo se presentaron cinco personas que se despojaron de las playeras que los identificaban como simpatizantes del sol azteca, y en su lugar se pusieron camisetas con propaganda de Peña Nieto.