La investigadora Elisa Vargaslugo exhibe 38 fotografías en el Museo Franz Mayer
''México siempre ha producido buen arte, pero no lo cuidamos''
Reconoce la UNAM su labor en un libro-homenaje
Durante más de 50 años ha investigado las expresiones novohispanas
Pide educar a las personas para que valoren ese patrimonio
Ampliar la imagen El arte es el reflejo de la historia y toda obra art�ica es producto de una �ca, de una ideolog� de una religi�eval�isa Vargaslugo, investigadora y catedr�ca de la Universidad Nacional Aut�a de M�co. Elisa trabajando, 1990, � de Carlos Bosch. FOTO Cortes�instituto de investigaciones esteticas/unam
Durante más de 50 años, la investigadora y catedrática Elisa Vargaslugo ha inculcado el conocimiento y la valoración de las manifestaciones artísticas e históricas plasmadas en arquitectura, pintura, escultura y manuscritos.
Para reconocer su trayectoria académica, en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) estudiantes y profesionales colaboraron en la publicación de un libro-homenaje a su trayectoria.
Así, Arquitectura, pintura y otras artes. Libro homenaje a Elisa Vargaslugo se presentó en días pasados en el Museo Franz Mayer.
Asimismo, en ese recinto de avenida Hidalgo 45, plaza de la Santa Veracruz, Centro Histórico), se presenta la exposición Arquitectura, pintura y otras artes, que incluye 38 fotografías en color tomadas por la investigadora, faceta que apenas dio a conocer.
El volumen propone un recorrido por la arquitectura, la pintura y la escultura; mediante archivos y documentos se aprenderá de iconografía guadalupana, grutas y columnas salomónicas, o de perlas bajacalifornianas, huipiles y enredos mexicas.
Por el acatamiento de la ley
Especialista en el virreinato, Vargaslugo señala que el arte colonial es parte de la historia del país.
''El arte es el reflejo de la historia y toda obra de arte es producto de una época, de una ideología, de una religión."
Promotora de la defensa del patrimonio cultural, la investigadora considera que falta educar a las personas para que valoren la riqueza de México.
''El pueblo tiene que cuidar lo que es suyo. Todavía no hay una adecuada vigilancia en las iglesias, los sacerdotes debe-rían tomar una parte más activa" en la protección de las obras religiosas.
Uno de los problemas que enfrentan los historiadores es el mal estado en que se encuentran muchos monumentos artísticos, porque no existe una conservación de los inmuebles.
''En México todavía no se sabe cuántos retablos hay y eso propicia los robos. Se llevan imágenes pintadas o esculpidas de los retablos, como ha sucedido en Tlaxcala y Puebla", estados ricos en arte que han sido saqueados.
El trabajo de campo es muy importante para el estudio académico, pero a veces los encargados de cuidar los templos impiden el acceso a las personas especializadas.
Otra dificultad que se presenta en la labor del historiador son los archivos. ''Ahora hay empeño en arreglarlos y se realizan catálogos, pues antes uno tenía que buscar para encontrar la noticia de algo".
Elisa Vargaslugo sostiene que aún falta mucho por conocer de los artistas de la Colonia, pues no hay mucha documentación. Además, recomienda que se impartan clases de historia de arte en todas las carreras, para que todas las personas valoren y conozcan el arte mexicano.
''Lo mejor que puede ofrecer México al mundo es su arte prehispánico, colonial, de los siglos XIX y XX.
''Actualmente hay muy buenos escultores y pintores; el país siempre ha producido buen arte, pero no lo cuidamos."
La académica propone que para mejorar la defensa del patrimonio, la ley debe aplicarse, pues en ocasiones no se acata. Los ciudadanos deben aceptar la ''aflicción'' de la ley, en el sentido de restaurar y conservar el patrimonio.
Organismos como Icomos-México ayudan a salvar el patrimonio, pero no cuentan con los recursos necesarios.
Ante esta situación, lo mejor es que la iniciativa privada o los ciudadanos se preocupen por salvar sus propios patrimonios artísticos.
A manera de ejemplo, mencionó el pueblo de Huichapan, Hidalgo, que ha sido arreglado por sus habitantes.
En Taxco, la iglesia de Santa Prisca, se está rescatando gracias a la restauración que realiza una asociación civil.
Enseñanza diligente
En abril de 1953, Elisa Vargaslugo comenzó su vida y labor académicas en la UNAM, en el Instituto de Investigaciones Estéticas, aunque ya tenía definida su vocación por el estudio del arte virreinal.
Agustín Espinoza, cuyo texto se incluye en el volumen, reconoce la admirable labor académica de la historiadora.
''Su pasión se ve reflejada en su lucha en el interior de la academia, de los patronatos y de las asociaciones civiles que velan por la conservación de los acervos que custodian los monumentos religiosos."
Vargaslugo ha sabido aplicar con gran acierto el uso de la fotografía a la investigación, al estudio, a la difusión y la enseñanza de la historia del arte.
La especialista ha dedicado toda una vida a escudriñar el arte novohispano, a su análisis puntual, a la enseñanza diligente y a la defensa del patrimonio artístico.
La muestra de 38 fotografías tomadas por Elisa Vargaslugo concluirá este domingo en el Museo Franz Mayer.