Declara "superada" la amenaza de inestabilidad política, que involucraba "a todos"
López Obrador todavía percibe riesgos
Destaca el "juicio público" que hay sobre Macedo, Vega Memije y algunos diputados
La amenaza de una situación de inestabilidad política, en la que "de una u otra forma, con mayor o menor responsabilidad, todos estábamos metidos", quedó totalmente superada, afirmó el jefe de Gobierno del Distrito Federal (GDF), Andrés Manuel López Obrador, aunque admitió la existencia de riesgos por la forma en que la Procuraduría General de la República (PGR) resolvió la averiguación previa del caso El Encino, al considerarlo probable responsable de desobediencia a una suspensión de amparo.
Declaró que eso no le resta calidad moral, pero reiteró su llamado a la dependencia federal para que demuestre que él es responsable del delito, y en cuanto al ex procurador Rafael Macedo, el ex subprocurador Carlos Javier Vega Memije y los diputados federales que votaron en favor del desafuero, consideró que "ya hay un juicio público" sobre ellos.
El gobernante señaló que confía fundamentalmente en el apoyo de la gente para impedir que pretendan de nuevo retorcer las leyes y ponerle obstáculos. "Tenemos el respaldo popular, y cualquier canallada se puede revertir si la gente considera que es una injusticia", afirmó.
Para López Obrador, el asunto del desafuero para intentar inhabilitarlo políticamente hizo evidente un divorcio en la actuación de las estructuras del poder con los sentimientos de la gente. De ahí la "lección" no sólo para el poder presidencial, sino también para los órganos de representación (la Cámara de Diputados): escuchar la voz del pueblo y no intentar desobedecerlo.
"Que se escuche la voz del pueblo, que es la voz de la historia; que nadie deje de atender a la opinión pública, de la gente. Por más que quisieron hacer creer que era por 'la defensa del estado de derecho', que era 'la estricta aplicación de la ley', o esa de que 'la ley es la ley', cuando todo era pura hipocresía, la gente nunca les creyó, porque es muy consciente, avispada, ahora hay más desarrollo de la conciencia ciudadana", apuntó. "Por ello la estructura de poder, las prácticas y la política tradicionales no pudieron aplastar la voluntad de la gente", prosiguió.
En su conferencia de prensa, luego de que la PGR determinó no ejercitar acción penal en su contra, López Obrador aceptó la solución que dio al asunto la dependencia federal como una forma de rectificar su error, aunque consideró que lo mejor hubiera sido admitir que no había pruebas, "porque esa es la realidad".
En cuanto a su condición de probable responsable de desobediencia a una suspensión de amparo, señaló que no afecta su calidad moral, porque ésta "no me la da la PGR, sino la gente y mi conciencia".
"Quiero que me digan cuál prueba existe para demostrar que soy responsable de ese delito", exigió, aunque recordó que está el expediente, el cual incluso aparece en internet para que pueda ser consultado por la gente y por especialistas.
Recordó que desde un principio señaló que no podrían consignarlo por no existir pena aplicable al respecto en el Código Penal Federal, como incluso lo documentó con varios casos similares en los que la misma PGR resolvió el no ejercicio de la acción penal, y como en su momento lo señalaron su asesor Javier Quijano y el presidente de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, José Luis Soberanes, quien fue amenazado por panistas y priístas tras opinar que sería un acto de discriminación si el Ministerio Público procedía penalmente contra el jefe del GDF.
Desestimó por ello los recursos que pretende interponer la defensa del dueño del predio El Encino, Federico Escobedo, contra la decisión de la PGR de no consignar el expediente, y agregó que no insistirá en pedir a sus adversarios políticos que den una disculpa pública a la gente a la que pretendieron violentar su derecho a la libertad de elegir libremente a sus gobernantes.
"El hecho de que el presidente Vicente Fox rectificara es más que suficiente, y ojalá nunca se vuelvan a cometer estas arbitrariedades", expresó, y reconoció el hecho de que por esta decisión "gente que estuvo alentando esta arbitrariedad ahora está muy molesta".
-¿Los priístas?
-Usted lo dice. Yo digo que hay gente así y no quiero señalar a nadie, nada más es cosa de leer los periódicos.
Para quienes votaron en favor de su desafuero, primero en la sección instructora y después en el jurado de procedencia, así como el ex procurador Macedo y el ex subprocurador Vega Memije, declaró que no pide nada, puesto que "ya hay un juicio público", pero insistió en que fue el pueblo el que realmente triunfó con la rectificación federal.
López Obrador adelantó que el lunes próximo anunciará formalmente el fin de una etapa y el inicio de otra, donde se quitará el listón tricolor, símbolo del movimiento de resistencia civil pacífica por la defensa de la voluntad popular y la libertad de elección. "Voy a guardarlo por si de repente se vuelve a necesitar", aclaró.
En cuanto a la reunión que sostendrá la tarde de hoy con Fox, López Obrador reiteró su intención de plantear el tema de las elecciones de 2006, al considerar que se malinterpretaron las declaraciones que hizo el Ejecutivo federal anteayer en Jamaica, de que no tendrá injerencia ni hará comentarios relacionados con el proceso comicial venidero.
"Creo que se refirió a que no iba a entrar en polémica sobre las elecciones exponiendo puntos de vista contrarios a los de los candidatos, y no a que excluiría el tema en la reunión del viernes."
El encuentro de hoy será el vigesimoséptimo entre ambos gobernantes desde que asumieron cargo en 2000. Fox acudió a la toma de posesión del tabasqueño en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal el 5 de diciembre de ese año, y la vez más reciente fue el 14 de febrero de 2005, al asistir a una sesión del Consejo Nacional de Seguridad Pública en el Campo Marte.