Su nombre se debe "a la valentía de Benedicto XV en la Primera Guerra Mundial"
En su primera audiencia pública el Papa envía un saludo en español
Rechaza cura acusaciones de espionaje para los servicios de seguridad comunistas de Polonia
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Saludo del papa Benedicto XVI a los fieles en la Plaza de San Pedro, ayer FOTO Reuters
Ciudad del Vaticano, 27 de abril. En su primera audiencia pública del miércoles en la plaza de San Pedro, a la que acudieron miles de personas, el papa Benedicto XVI comenzó a acercarse a las multitudes, saludando en varios idiomas -español inclusive- mientras defendió las raíces cristianas de Europa, "a las que no podemos renunciar".
"Saludo a los peregrinos españoles y a la Estudiantina del Instituto católico La Paz de Querétaro, en México, así como a los demás fieles venidos de España y América Latina y a cuantos están unidos a través de la radio o la televisión", dijo el Papa en español al retomar la tradicional audiencia, interrumpida hace casi tres meses por la enfermedad de Juan Pablo II.
El saludo en español fue ovacionado y bien recibido, sobre todo después de que en la audiencia del pasado sábado con la prensa acreditada ante la Santa Sede, Ratzinger no habló en español, la lengua de la mitad de los católicos del mundo.
En una señal de que se está despojando de su imagen austera, se dirigió hoy a un grupo de alemanes con las palabras Gruess Gott (Dios los bendiga), saludo familiar en su Baviera natal, y mostró mayor soltura con los miles de peregrinos, algo que había exhibido en contadas ocasiones durante el cuarto de siglo que fue severo guardián de la doctrina de la Iglesia, al frente de la congregación heredera de la Inquisición.
Benedicto XVI hizo un resumen de la catequesis en varias lenguas, y explicó en español que eligió el nombre de Benedicto "en relación con el Papa Benedicto XV, un valiente y auténtico profeta de paz ante el drama de la Primera Guerra Mundial".
Sus palabras fueron aplaudidas de nuevo por los cerca de 15 mil peregrinos, entre ellos latinoamericanos que lo interrumpieron entonando la célebre canción Cielito lindo.
Por otro lado, el Papa defendió las raíces cristianas de Europa como un punto de referencia para la unidad del viejo continente, y recordó "la extraordinaria herencia espiritual" dejada por su predecesor Juan Pablo II.
Espía en el Vaticano
En Varsovia, el Instituto de la Memoria Nacional (IPN) afirmó hoy que un cura polaco encargado de guiar peregrinos en el Vaticano durante el pontificado del difunto Juan Pablo II fue colaborador de los servicios comunistas de seguridad de Polonia (SB).
"El IPN posee una serie de documentos en los que consta que el padre Konrad Stanislaw Hejmo fue en los años 80 colaborador secreto de los servicios de seguridad comunistas", dijo el director del instituto y fiscal polaco para crímenes de nazis y comunistas, Leon Kieres.
El sacerdote Hejmo, un dominico de 69 años que conocía a Karol Wojtyla antes de que éste fuera elegido Papa, rechazó estas acusaciones calificándolas de "absurdas", y consideró que sus comunicaciones desde Roma pudieron haber sido grabadas a sus espaldas, y utilizadas por el SB.