Julio Frenk Mora
En el Hospital Juárez no habrá medidas autoritarias
La Secretaría de Salud (Ssa) "no va a tomar ninguna medida autoritaria ni vamos a hacer nada para reducir servicios, porque el negocio de la Ssa es dar servicios, no quitarlos", aseguró Julio Frenk Mora, titular de la dependencia, al referirse a la situación del Hospital Juárez del Centro, cuyo inmueble será cedido a la Suprema Corte de Justicia de la Nación, según consta en un escrito elaborado por la secretaría y que fue dado a conocer hace algunas semanas por los trabajadores del nosocomio.
Según Frenk, "no ha habido ninguna intención de cerrar algún servicio; lo que queremos es ejercer las mejores condiciones para los trabajadores", y es por eso que funcionarios de la secretaría sostienen un "intenso diálogo con cada uno de ellos, porque apreciamos mucho su trabajo", pero sobre todo porque se quiere "ofrecer también a los pacientes las mejores condiciones para que sean atendidos con calidad".
Tras acotar que desde un principio la postura "ha sido muy clara" respecto a no limitar la oferta sanitaria, el funcionario resaltó que lo que se quiere es "encontrar el espacio digno que garantice buena calidad a los pacientes y a los trabajadores, para que desempeñen su labor en condiciones de seguridad".
Es por esto que la dependencia solicitó a la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) un dictamen respecto a la condiciones estructurales del inmueble, el cual fue afectado por los sismos de 1985. Pero de manera paralela, los 450 trabajadores del hospital solicitaron que se efectúe otro dictamen, "independiente al de la universidad", con lo cual "estamos de acuerdo", refirió Frenk.
La postura sindical
En entrevista aparte, César Alvarez Jiménez, secretario general de la sección 15 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Ssa, confirmó que están en espera de los resultados de los dos dictámenes, para "tener un sustento mayor respecto a si el edificio está tan dañado como se dice", e informó que hoy trabajadores del Hospital Juárez del Centro marcharán hoy, por segunda vez, pero en esta ocasión no será a la Ssa, sino a la Cámara de Diputados.
La intención es que "podamos hablar con los integrantes de la Comisión de Salud y con los coordinadores de los grupos parlamentarios, con el propósito de ver la posibilidad de que nos apoyen", comentó Alvarez, y precisó que el contingente saldrá de la calle Jesús María, en el Centro Histórico (calle aledaña al nosocomio), poco después de las ocho de la mañana.
Según el dirigente, no sólo marcharán trabajadores, sino también algunos pacientes y organizaciones asentadas en el centro, cuyos integrantes recurren a los servicios del hospital, a los cuales un eventual cierre les afectaría.
El dictamen de la UNAM permitirá "valorar algunos informes que ya tenemos de que sí es un edificio con algunos daños estructurales". No obstante esto, como la propuesta sería reubicarlos (indicó Alvarez Jiménez), los trabajadores de la Ssa, "para tranquilidad de los ciudadanos, no vamos a limitar los servicios".