El grupo, con patente de corso; las denuncias no prosperan
Los minutemen privan a migrantes de agua y alimentos, acusan ONG
Organizaciones pro migrantes en Estados Unidos denunciaron que pese a los compromisos establecidos por los gobiernos de ese país y México se siguen violando los derechos humanos de migrantes indocumentados, "al ser víctimas de maltratos y abusos de vigilantes cazamigrantes".
Ray Ybarra, integrante de la misión de observadores de la Unión de Estadunidenses por las Libertades Civiles (ULCA, por sus siglas en inglés), afirmó que los minutemen "festejan como si fuera un trofeo la captura de algún migrante; se oponen a que se graben las detenciones, y permiten que los indocumentados permanezcan sin acceso a líquidos o alimentos aunque lleven varios días caminando en el desierto".
Hasta el momento, agregó, participan 120 observadores civiles en el seguimiento de las acciones que realizan los integrantes del Minuteman Project, quienes pretenden extender sus operaciones hacia la región de El Sásabe, Sonora.
Ybarra, quien fue agredido por un cazamigrante cuando videogrababa una detención ilegal, indicó que 200 voluntarios más se encuentran en capacitación para integrarse a las labores de vigilancia ciudadana, por lo que aseguró que "seguiremos a cualquier parte a los minuteman y denunciaremos cualquier violación a los derechos humanos de los migrantes".
Indicó que la "impunidad" de que gozan estas agrupaciones "impide que muchas denuncias prosperen", a lo que se suma la falta de apoyo de las autoridades mexicanas, "quienes no presionan para dar seguimiento a estos casos".
En entrevista por separado, Isabel García, integrante de la Coalición de Derechos Humanos Alianza Indígena Sin Fronteras, indicó que pese a la falta de resultados, los grupos "racistas" de cazamigrantes han logrado "envenenar el diálogo sobre la migración indocumentada y alimentar la ignorancia e indiferencia de los ciudadanos estadunidenses y con ello reforzar el proceso de militarización de la frontera".
Afirmó que la próxima semana grupos de cazamigrantes acudirán a Washington para iniciar un proceso de cabildeo que les garantice el apoyo de los legisladores a sus campañas antinmigrantes y facilitar la inclusión de más elementos de la patrulla fronteriza.
La ventaja que han alcanzado estos grupos, señaló, es alimentar el clima de odio racial y desinformación sobre el fenómeno migratorio, pues a pesar de la enorme contribución de los trabajadores indocumentados a la economía de este país, "priva la ignorancia y la indiferencia en la mayoría de los sectores sociales estadunidenses, por lo que han contribuido a cerrar el diálogo y a justificar que lo más conveniente es cerrar la frontera y negar cualquier servicio social a los migrantes indocumentados".
La falta de conciencia sobre las aportaciones que realizan los migrantes, "daña no sólo a quienes están cruzando la frontera, sino a todo aquel residente indocumentado que se ve expuesto a las acciones racistas y xenófobas de grupos como los minutemen, quienes cuentan con importantes apoyos económicos y políticos".
Por ello exhortó a que más activistas se sumen a los programas de vigilancia civil para revisar las acciones de estos grupos, a fin de cubrir "toda la frontera y evitar que se sigan cometiendo más abusos".