''Si la mayoría de los mexicanos me eligen Presidente no voy a actuar con venganza''
A las puertas de Los Pinos, López Obrador pidió a Fox que rectifique
Lo llamó a recapacitar por el bien de México, de la libertad, de la justicia y la democracia
Visitó el plantón del PRD
El EMP le franqueó el paso
Muestras de apoyo de transeúntes y automovilistas
''Si la mayoría de los mexicanos me eligen Presidente, no voy a actuar con venganza ni les voy a fabricar delitos a mis adversarios políticos'', sostuvo ayer Andrés Manuel López Obrador a 20 metros de la residencia oficial de Los Pinos, adonde acudió durante el relevo de senadores que mantiene un ayuno desde hace ocho días.
En su primera visita a uno de los sitios en que se llevan a cabo acciones de resistencia civil pacífica en protesta por su desafuero, López Obrador llamó al presidente Vicente Fox a recapacitar y le pidió que rectifique su actitud por el bien de México, de la libertad, de la justicia y la democracia.
''Si hay diferencias, que las hay, en cuanto a concepción de país, en cuanto a proyecto de nación, esas diferencias las tenemos que resolver mediante el método democrático. Es en las elecciones donde el pueblo va a decidir qué candidato, qué partido, qué programa debe prevalecer en nuestro país a partir de las elecciones de 2006'', sostuvo López Obrador bajo la carpa en la que desde hace una semana se han instalado sucesivamente los senadores perredistas -a excepción de Demetrio Sodi- para iniciar ayunos de 24 horas en repudio al intento foxista de eliminar de la carrera presidencial al jefe de Gobierno del Distrito Federal.
López Obrador arribó a las inmediaciones de Los Pinos a las 11:28 de la mañana, lo que provocó un nuevo despliegue de efectivos del Estado Mayor Presidencial (EMP) a lo largo de las vallas que desde el martes pasado se instalaron sobre la avenida Parque Lira, y que mantienen bloqueado el acceso desde la explanada de la estación del Metro Constituyentes hasta la puerta número 1 de la casa presidencial.
Sin embargo, ningún elemento del EMP se opuso al ingreso a ese largo pasillo del jefe de Gobierno; inclusive, los soldados franquearon el paso y López Obrador, acompañado por el coordinador de los senadores perredistas, Jesús Ortega, y los legisladores Ricardo Gerardo Higuera, Oscar Cruz y Saúl López, caminó hasta el toldo bajo el cual han ayunado, hasta hoy, siete senadores de la República.
Ahí Ortega afirmó que el gobierno foxista, con su actitud en contra de López Obrador, ha violado preceptos de los acuerdos asumidos por México ante la Unión Europea en materia de democracia, violaciones que, aseguró el legislador, podrían invalidar tales convenios. Por ello, anunció, el miércoles de la semana próxima parte a Bruselas, sede de la UE, una comisión de legisladores perredistas que darán cuenta del ''atropello a la democracia'' derivado del desafuero del jefe de Gobierno.
Luego, el mandatario capitalino insistió en que su desafuero no sólo es un agravio a su persona, ni se reduce a privarlo de sus derechos políticos; lo que se pretende, dijo, es algo más grave: ''Es dejar al pueblo de México sin el derecho de elegir libremente a sus autoridades; es un verdadero retroceso democrático, un golpe a la incipiente democracia mexicana''.
Los espacios de libertad, de justicia y de democracia en el país, agregó, han costado mucho. ''Estos principios los tenemos que defender; la libertad, ustedes saben, no se implora, se conquista. No es posible, bajo ninguna circunstancia, que sea aquí, en Los Pinos, donde se decida quién debe ser y quién no el Presidente de México'', aseveró.
Acompañado por demostraciones de solidaridad de quienes transitaban a mediodía por la avenida Parque Lira, López Obrador llamó al presidente Fox a recapacitar, a que rectifique, a que deponga su actitud por el bien de México, por el bien de la libertad, de la justicia y la democracia, a que actúe como hombre de Estado. ''De mi parte siempre va a haber una actitud responsable. Nosotros no apostamos a desestabilizar al país, no apostamos a desestabilizar la economía, las finanzas; nosotros vamos al cambio por el camino de la paz, por el camino de la concordia. De una vez lo digo aquí, frente a Los Pinos, que representa mucho desde el punto del ejercicio del poder:
''Si el pueblo de México, si la mayoría de los mexicanos me elige Presidente, yo no voy a actuar con revanchas, no voy a actuar con venganzas. Yo no odio, yo no voy a fabricar delitos a mis adversarios; yo voy a actuar por encima de las pasiones, por encima de las luchas de grupos, de partidos, por encima de las luchas de facciones. El pueblo de México requiere un cambio de verdad, y ese cambio sólo se puede lograr si se levanta la mira, si se convoca a todos para lograr una verdadera transformación en el país'', subrayó.
Poco antes, el coordinador de los senadores perredistas, Jesús Ortega, refirió que con la presencia de Andrés Manuel López Obrador en el sitio donde han ayunado siete senadores de ese partido se inicia una nueva etapa en la lucha de resistencia civil pacífica. ''De lo que se trata es que el Presidente de la República y quienes estén involucrados en este asalto a la democracia, sepan que no nos vamos a dejar, y sepan que por todos lados llevaremos la expresión de nuestra protesta.''
Anunció que en el contexto de sus tareas como senadores van a informar a la comunidad internacional sobre esta ''flagrante violación a nuestras leyes''. Adelantó que una delegación de legisladores perredistas, aún por definir, se trasladará a Bruselas, sede de la Unión Europea, para informar a representantes de la misma que el gobierno mexicano está violentando el Acuerdo de Asociación Económica, Concertación Política y Cooperación, signado entre la UE y México.
''El gobierno está violando el artículo número uno de este acuerdo, que es conocido como la cláusula democrática, y que establece el respeto a los principios democráticos y a los derechos humanos fundamentales, tal como se enuncia en la Declaración de los Derechos Humanos; inspira, dice el acuerdo, las políticas internas e internacionales de las partes, y constituye un elemento esencial de este acuerdo. Con sus acciones, el gobierno mexicano está violentando el derecho internacional, y por supuesto nuestras formas jurídicas y legales'', concluyó Ortega Martínez.