Batres y Ensástiga guiarán al instituto político en el DF
Rinde protesta hoy la nueva dirigencia del partido del sol azteca en la capital
Martí Batres Guadarrama y Gilberto Ensástiga Santiago rendirán hoy protesta como presidente y secretario general respectivamente del Partido de la Revolución Democrática (PRD) en el Distrito Federal en sustitución de Agustín Guerrero e Isaías Villa, siendo su principal reto la defensa del jefe de Gobierno capitalino, Andrés Manuel López Obrador.
"El PRD encabezará todas las acciones de resistencia civil en apoyo a Andrés Manuel López Obrador en el DF, y apoyará las acciones en otras entidades", adelantó el diputado federal con licencia Ensástiga Santiago.
En opinión del secretario general electo hace falta mucha organización en el PRD capitalino, y esto sólo se "logrará a partir del buen funcionamiento de los órganos de gobierno en todos los niveles, hasta la atención de la militancia".
Agregó que la nueva dirigencia tendrá que definir las prioridades y con base en éstas distribuir los recursos del erario que se reciben del Instituto Electoral del DF (IEDF) por medio de las prerrogativas. Pero sobre todo, dijo, "debemos transparentar el manejo del dinero a toda la militancia".
Ensástiga Santiago señaló que el panorama que ve es bueno, "tenemos muchas probabilidades de mantener el gobierno de la ciudad en 2006".
Explicó que hoy sólo rendirán protesta, él en la secretaría general y Batres como presidente, mientras que el resto del comité quedará integrado el primero de mayo.
Puntualizó que hasta ayer por la noche no habían recibido ningún informe de parte de la dirección saliente. Sin embargo, advirtió que presentará un reporte a los militantes sobre las condiciones en las que recibirá el partido tanto en lo material como en el trabajo con los sectores.
Al hacer un balance de la actuación de Guerrero Castillo, el secretario general electo reconoció que fue destacada al evitar que el partido en el DF se resquebrajara a raíz de los videoescándalos en los que se ve al líder moral de la Corriente de Izquierda Democrática, René Bejarano, y al ex delegado de Tlalpan Carlos Imaz, recibiendo dinero del empresario Carlos Ahumada.
"Debemos reconocer que esto generó una crisis interna muy fuerte y Guerrero evitó que se agudizara", acotó.
Por su parte, el vicecoordinador de la fracción del PRD en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, Alfredo Hernández Raigosa, calificó "con siete" la actuación de Guerrero Castillo, "sacó el partido bien, a secas".
Para el diputado local los retos de la nueva dirigencia serán: enfrentar la causa del desafuero de Andrés Manuel López Obrador, organizar el partido y colocarse por arriba de corrientes e intereses particulares.
Guerrero Castillo asumió el cargo de secretario general del PRDcapitalino en junio de 2002, el cual dejó siete meses después para hacerse cargo de la presidencia, en sustitución de Víctor Hugo Círigo, quien buscó la candidatura a la Jefatura delegacional de Iztapalapa.
Durante las elecciones en 2003, el PRD obtuvo 37 curules en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal y ganó las delegaciones de Venustiano Carranza, Alvaro Obregón y Cuajimalpa, llegando a dirigir 13 de las 16 en que se divide la capital.
Agustín Guerrero deja también una deuda de más de un millón de pesos que se tendrán que pagar al IEDF por irregularidades en el manejo de los recursos de gastos ordinarios en 2002, y está pendiente otra multa al PRD por anomalías en la revisión de los recursos utilizados en 2003.