Continúan pegando carteles en la calle, y hasta quieren componerle canciones
Recibe López Obrador en su domicilio muestras de afecto de simpatizantes
Por cuarta ocasión le rezan el rosario; Para el panista Akabani no hay nada que celebrar
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Andr�Manuel L� Obrador, a la salida de su domicilio para dirigirse a su conferencia de prensa, es recibido por simpatizantes que le obsequian flores y varias muestras de apoyo FOTO Mar�Melendrez Parada
El "¡los quiero desaforadadmente!", con el que Andrés Manuel López Obrador cerró su discurso ante miles de personas en el Zócalo, poco antes de que las diputaciones de PRI, PAN y PVEM aprobaran el dictamen de desafuero, se convirtió este domingo en eco de muchas de las personas que acudieron a su domicilio a manifestar su solidaridad.
"¡Te queremos desaforadamente!", escribió un grupo de estudiantes sobre una cartulina amarilla, mientras dos señoras comentaban entre sí, "hay que ver cómo le componemos una canción para decirle que lo amamos desaforadamente".
Aprovechando el día de asueto, simpatizantes acudieron a pegar más mantas y cartelones afuera del edificio donde vive y muchos comenzaron a extenderlos en los muros de los domicilios contiguos. Algunos de los mensajes dicen: "Andrés Manuel, la facultad de Química te apoya! Otro: "Hoy hubo gran asalto a nuestro país, el PAN y el PRI-Verde nos robaron la verdad de la democracia; no estás sólo". Uno más: "AMLO, tú eres hijo del pueblo; te apoyamos. No a Fox, hijo de Salinas".
Pasado el mediodía, la presencia de personas se intensificó sobre Odontología, conocida también como Paseo de los Universitarios, calle que ya tomó forma de oficina ambulante, en la cual, mientras reporteros trabajan sobre las banquetas, la gente comparte papel, marcadores y cinta adhesiva para pegar carteles.
La jornada de ayer afuera de la casa de López Obrador comenzó a las 7 de la mañana, cuando un grupo de iztapalapenses rezó un rosario "para fortalecer su integridad física y espiritual"; luego más gente comenzó a juntarse, algunas personas le trajeron una banda, que a petición del propio jefe de Gobierno se abstuvo de comenzar con la tambora, para evitar molestias a los vecinos. A las 8 horas salió, y en medio de simpatizantes, reporteros y camarógrafos se dirigió al jardín cercano para comenzar su acostumbrada conferencia de prensa. Pidió a sus seguidores no asistir en grupos numerosos, para no afectar a los vecinos y les dijo que ahora tiene bastante tiempo para reflexionar y leer. En el transcurso de la mañana campesinos de la comunidad de Xaltepuxtla, en la sierra norte de Puebla, dijeron que le darán 30 mil "plantitas de sombra", que se pueden vender en cinco pesos, cada una, para apoyar la causa.
Más tarde, cuando concluyó el partido de los Pumas, dos de sus hijos, José Ramón y Andrés, regresaron a su domicilio y coincidieron con Agustín Guerrero, dirigente del PRD-DF, quien no entró al inmueble, pues dijo que sólo pasaba "para ver cómo estaban las cosas".
Al igual que los reporteros que se arremolinaron alrededor de su automóvil, varios de los simpatizantes se acercaron a pedirle que "protejan más a López Obrador", pero el dirigente respondió que no era necesario, "porque, mientras la gente lo arrope, AMLO está muy protegido". Mencionó que la decisión de desaforar al jefe de Gobierno "lo único que ha hecho es fortalecerlo políticamente". La PGR, dijo, está desesperada y al subprocurador Carlos Vega Memije, quien ha asegurado que si López Obrador es encarcelado no podrá hacer campaña, se le olvida la historia de México, pues el principal movimiento social del siglo pasado nació en una cárcel de San Luis Potosí, con Francisco I. Madero.
Entre tres y cinco de la tarde, el número de simpatizantes disminuyó a una decena, pero anteriormente la calle estuvo llena de coches en ambos sentidos. Cuando el oficial mayor, Octavio Romero Oropeza; el director de Patrimonio Inmobiliario, Alberto Pérez Mendoza, y el chofer del mandatario local, Nicolás Molinedo, ingresaron al inmueble, un grupo de señoras de la Gustavo A. Madero colocaron veladoras sobre la acera y, por cuarta noche consecutiva, rezaron el rosario.
Romero Oropeza y Pérez Mendoza salieron del lugar casi hora y media después; el primero aseguró que no trataron ningún asunto del gobierno capitalino, pues sólo visitó a López Obrador como amigo, a quien vieron "muy tranquilo y con buen ánimo".
Mientras unas 40 personas se unían a la oración, sobre la calle no cesaban de pasar automóviles que se detenían para leer los carteles pegados.
En el lugar también se repartieron volantes sobre el plan de ocho puntos para la resistencia civil, impresos por algunos vecinos. Patrullas de Coyoacán realizan rondines cada media hora sobre la calle, que por la noche tiene problemas de circulación, debido a la cantidad de autos de simpatizantes estacionados.
El jefe delegacional en Benito Juárez, Fadlala Akabani, aseguró que como panista no tiene nada que festejar por el desafuero del jefe de Gobierno, Andrés Manuel López Obrador, y advirtió que el hecho no representa nada bueno para el Distrito Federal.