Carece de sustento jurídico, apunta la dirigencia del tricolor
Descalifica el PRI la controversia de la ALDF
La controversia constitucional que presentó la Asamblea Legislativa del Distrito Federal ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación, en contra del desafuero de Andrés Manuel López Obrador es improcedente, afirmó ayer la dirigencia nacional del PRI.
Sostiene que la argumentación de los legisladores a la Asamblea carece de sustento jurídico, ya que no coincide con los lineamientos que para tal efecto establece la Constitución. El Distrito Federal no es estado; el jefe del Gobierno del Distrito Federal no es Gobernador y la Asamblea Legislativa no es Congreso local, destaca.
La dirigencia tricolor advirtió que los asambleístas deben allanarse a las resoluciones de la Cámara de Diputados, instancia que está facultada para erigirse como Jurado de Procedencia para desahogar un proceso de desafuero, como sucedió la semana pasada.
En un comunicado llama a la Asamblea Legislativa a acatar la resolución del dictamen sobre el desafuero de la Cámara de Diputados, tal como lo hace en materia de seguridad pública y de endeudamiento público, rubros en los que el Congreso de la Unión, también está facultado para legislar en el caso particular del Distrito Federal.
Menciona que del mismo modo en que se desahogó otra iniciativa votada en la Asamblea y se turnó a la Cámara de Diputados, para quitarle el fuero a los funcionarios que pidan licencia "y de manera insólita se desistieron de la misma ante la Cámara de Diputados, de nueva cuenta se demostró ignorancia, improvisación y novatez en este procedimiento".
La dirigencia priísta insistió en que el único camino que queda es apegarse a la legalidad y acatar la resolución asumida por la mayoría de los diputados.