En 100 años la temperatura podría subir hasta en 5.8 grados, advierte el Nobel de Química
Alerta Mario Molina sobre riesgos del calentamiento global
El premio Nobel de Química Mario Molina Pasquel advirtió ayer que el desarrollo del mundo está en riesgo si no se adoptan medidas firmes para reducir las emisiones de gases con efecto invernadero que ocasionan el cambio climático global, ya que en 100 años se prevén incrementos en la temperatura que irían de 1.4 a 5.8 grados centígrados, lo cual sería desastroso.
Frente a ello, sugirió una reforma para propiciar el uso de energías más eficientes y menos intensivas, de manera que se generen menos daños al ambiente, ya que el consumo de combustibles fósiles es uno de los factores que han incidido en la generación de gases como el bióxido de carbono.
El especialista participó con una conferencia magistral en el seminario Oportunidades de desarrollo sustentable en México, donde dijo que el incremento en la temperatura que se daría en los próximos 100 años, de mantenerse la tendencia actual del cambio climático, equivale a un efecto "tan dramático como una glaciación, poniendo en riesgo el desarrollo de los países".
Aseveró que lo mismo ocurre con el nivel del mar, que en ese periodo podría elevarse entre nueve y 88 centímetros en todo el planeta, con consecuencias muy graves para la población. Precisó que en México la zona más vulnerable es el Altiplano, donde se pueden presentar desde lluvias torrenciales hasta sequías, como efecto del cambio climático que se genera con el uso de energías ineficientes.
Los principales retos ambientales de este siglo, como son evitar el agotamiento de los recursos naturales y la disposición de residuos sólidos y peligrosos, tendrán que convocar a la sociedad mundial para mitigar las transformaciones que se presentan en la atmósfera, consideró.
Si la humanidad no toma conciencia de los riesgos del cambio climático, seguirá la afectación al medio ambiente y el fenómeno crecerá con efectos negativos a la salud de la población, la agricultura, bosques, agua, costas y áreas naturales.
Pese a este panorama, el científico confió en que en los próximos 50 años se puedan crear tecnologías para solventar el problema, con acciones que partan del uso de gas natural y de promover la eficiencia energética. Precisó que el Protocolo de Kyoto, que entró en vigor el pasado 16 de febrero, es una herramienta importante para reducir las emisiones de gases con efecto invernadero que generan los países industrializados.
Por su parte, el secretario de Medio Ambiente, Alberto Cárdenas Jiménez, dijo que antes de finalizar este sexenio, México entregará la tercera comunicación del Inventario Nacional de Emisiones de Gases de Efecto Invernadero, que forman parte de los compromisos asumidos en la Convención de Naciones Unidas sobre Cambio Climático.