Usted está aquí: viernes 8 de abril de 2005 Capital Ayer, jornada de ira, llanto y... serenatas

El apoyo llegó a Copilco

Ayer, jornada de ira, llanto y... serenatas

LAURA GOMEZ FLORES

La jornada finalizó con una serenata, indignación y lágrimas.

Antes de que el jefe de Gobierno llegara a su domicilio particular, en la calle de Odontología, decenas de vecinos ya lo esperaban para mostrarle su apoyo.

Conforme pasaban los minutos y la sesión en la Cámara de Diputados se alargaba el número de personas congregadas aumentó y para las 20:30 horas más de 600 simpatizantes se concentraron en la calle de Odontología, Copilco, en el sur de la ciudad.

Radios portátiles, televisiones y autoestéreos se encendieron. Todos sintonizados en las programas que daban cuenta de lo que sucedía en el interior del recinto legislativo.

Las voces de Pablo Gómez y cada uno de los diputados que hicieron uso de la palabra, fuera para hablar en contra o a favor del dictamen, tuvieron eco en la colonia Copilco Universidad.

Los ánimos se encendieron durante el debate entre Pablo Gómez y Manlio Fabio Beltrones, no faltó quien recordara el pasado salinista del diputado priísta y en cuanto comenzó la votación, un silencio se apoderó del lugar.

Ciertos de la nula posibilidad de que los legisladores votaran a conciencia, los simpatizantes de López Obrador se mantuvieron atentos al resultado de la votación.

Al darse a conocer el resultado para muchos las lágrimas resultaron incontrolables. Acompañada de un amigo, Nayeli, se apostó justo en la acera de enfrente del domicilio del político tabasqueño. La joven de 20 años en todo momento mostró una cartulina que reprochaba la acusación hecha por la Procuraduría General de la República.

De pronto, Nayeli rompió en llanto y de inmediato la atención se centró en ella.

No alcanzó a decir nada, únicamente sollozó y esto desato el llanto en decenas de personas.

Minutos después, aseveró: "Fue un atropello, hoy (ayer) murió la poca justicia que había en el país, la lucha que se ha realizado desde la izquierda desde hace muchos, muchos, años".

Pasado el llanto, la indignación fue en aumentó: "Fox y Martha, quédense en Roma, no los necesitamos aquí"; "PRI y PAN, vayan a chingar a su madre"; "Salinas, Cevallos, Madrazo ni así nos ganan".

Exactamente a las 20:00 horas integrantes de una estudiantina de nombre Yaoli llegaron a la calle de Odontología. Comenzaron las canciones y los gritos para que Andrés Manuel López Obrador saliera a saludar.

Los integrantes del grupo, dijeron apoyar a López Obrador y haber recibido "la invitación" de la delegación Coyoacán para llevar a cabo la serenata, media hora después s eles sumaría el grupo Trovadores Jarochos, quienes lograron que no pocos comenzaran a bailar.

Lo cierto es que quienes se congregaron en la colonia ubicada a un costado de Ciudad Universitaria, no tenían ni distintivos, no eran movilizados con altavoces y cada quien llegó por sus propios medios.

 
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