Irlanda del Norte
Abandonar la lucha armada, pide Gerry Adams al ERI
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El l�r del Sinn Fein habla con los periodistas FOTO Ap
Belfast, 6 de abril. Gerry Adams, líder del Sinn Fein, ala política del Ejército Republicano Irlandés (ERI), instó hoy al grupo armado a adoptar la "histórica" decisión de abandonar la lucha armada en forma definitiva y aceptar una solución política para cumplir con los objetivos de terminar el dominio británico en Irlanda del Norte.
"En el pasado, yo defendí el derecho del ERI a recurrir a la lucha armada. Lo hice porque no había otra alternativa para quienes se oponían a arrodillarse y querían enfrentarse a la opresión", dijo en conferencia de prensa.
"Ahora sí hay una alternativa", añadió, flanqueado por miembros de su partido en Belfast, refiriéndose a un proceso de paz que lleva casi tres años estancado.
"Para progresar es necesario construir un apoyo político para nuestros objetivos republicanos y democráticos en Irlanda", aseguró, al rendir homenaje a la valentía de los militantes de la organización.
"Quiero aprovechar esta ocasión para llamar a los jefes del ERI a asumir y aceptar completamente esta solución", dijo Adams, siete años después de los acuerdos de paz del Viernes Santo con los protestantes.
"Es el momento de que vuelvan a arriesgarse" pero ya "no como voluntarios que arriesgan sus vidas sino como militantes de un movimiento nacional hacia la independencia y la unidad" de la isla, dijo dirigiéndose a los miembros del ERI.
El gobierno británico reaccionó a este anuncio sin precedentes calificándolo de "un paso adelante" hacia un enfoque "democrático y pacífico".
Adams eligió para su intervención histórica el primer día de la campaña de las elecciones legislativas y municipales que se celebrarán el 5 de mayo en Irlanda del Norte y Gran Bretaña.
Después de un conflicto de 30 años durante el cual fue uno de sus principales objetivos, el gobierno británico advirtió el miércoles que evaluará al ERI en función de su respuesta al llamado de Adams.
El ERI respeta un alto del fuego desde 1997 pero siguió cometiendo atentados que pusieron en aprietos al Sinn Fein, el principal partido católico norirlandés.