Doce heridos y dos desaparecidos, el saldo del ataque
Nuevo bombazo en Beirut contra barrio cristiano; van 4 en 14 días
Ampliar la imagen Civiles y militares libaneses intentan rescatar a peregrinos que viajaban en un cami�ue volc� la carretera rumbo a Damasco FOTO AFP
Beirut, 1º de abril. Una bomba estalló esta noche en un centro comercial del pueblo cristiano de Broumnah, que dejó un saldo de 12 personas heridas, entre ellos un estadunidense, dos desaparecidos y numerosos daños materiales.
El líder de la oposición drusa, Walid Jumblat, atribuyó la responsabilidad a los servicios de seguridad libaneses respaldados por Siria, y aseguró que "ellos sólo quieren el terrorismo y saben que sus días están contados".
La bomba estalló en el estacionamiento subterráneo del centro comercial en Broumnah, muy popular entre los árabes durante el verano, y además de los daños al edificio varios automóviles estacionados en los alrededores quedaron destruidos.
"La gente entró en pánico y prefirió caminar por las calles bajo la lluvia. La explosión causó terror entre los residentes de Broumnah", ubicada a 20 kilómetros al noreste de Beirut, afirmaron integrantes de la Cruz Roja.
La explosión es el cuarto ataque con bomba en dos semanas en el área cristiana de Beirut. Los atentados previos mataron a tres empleados asiáticos e hirieron a 26 personas.
Mientras, políticos sirios rechazaron este día una nueva renuncia del primer ministro designado, Omar Karame, tras su fracaso en persuadir a la oposición de unirse a una amplia coalición de gobierno.
Se preveía que Karame renunciaría el miércoles pasado durante un encuentro con el presidente Emile Lahoud, pero pospuso su decisión para consultas pendientes con sus aliados.
Empero, la oposición acusó el jueves a las autoridades pro sirias de buscar una demora en las elecciones legislativas del 31 de mayo entrante, en un intento por retener el control del Parlamento.
La tarea del primer ministro ha sido obstruir la formación de un gobierno para dilatar los comicios, aseveró la oposición, que está segura de emerger como ganadora en medio de la indignación popular por el asesinato, el 14 de febrero, del ex primer ministro Rafic Hariri.
Karame renunció por primera vez el 28 de febrero, ante grandes manifestaciones tras la muerte de Hariri, así como por la presión de la comunidad internacional y de la oposición antisiria.