Repudio en Argentina
Desatan polémica dos convenciones antiterroristas
Buenos Aires, 31 de marzo. La aprobación de la mayoría de la Cámara de Diputados de dos convenciones antiterroristas que requería el gobierno de George W. Bush a Argentina desató dura polémica y colocó al gobierno de Néstor Kirchner en el centro de la acusación de sectores políticos sociales y humanitarios por "ceder" a las presiones de Washington, en momentos en el canciller argentino, Rafael Bielsa, se reunía con su par estadunidense, Condoleezza Rice.
En el periódico Clarín se estimó que el gobierno "toma distancia" del presidente Hugo Chávez y "le da una señal a Estados Unidos", al comentar declaraciones del ministro de Defensa, José Pampuro, quien dijo esperar que "la compra de armas de Venezuela no signifique una escalada en una región que se mantiene en armonía y paz".
A dos días de que Bush llamó por teléfono a Kirchner y le dijo estar "preocupado" por la "agresividad" de Chávez y la compra de armas realizada por Venezuela, esta declaración puso nuevas dudas en sectores inclusive afines al gobierno local.
Pampuro, además, estableció una diferencia al comentar que para Argentina "no es prioritario" el tema de las armas. Otros analistas señalan que uno de los objetivos de la "diplomacia Rice" es "impedir que se extienda la influencia de Chávez y su revolución pacífica al resto de América".
División en el justicialismo
En este complejo panorama de la política local y las divisiones en el justicialismo gobernante, causó impacto una declaración en defensa de Chávez del ex presidente Eduardo Duhalde, quien consideró que el interés de Estados Unidos en Venezuela ronda en torno al petróleo, y recordar que el mandatario venezolano fue elegido democráticamente, mientras que el golpe de Estado de 2002 contó con apoyo estadunidense.
Este tema junto con la votación por los diputados de las convenciones antiterroristas impactaron aquí. "Si estas leyes hubieran estado en la dictadura, miles de argentinos por el sólo hecho de ser peronistas o de izquierda hubieran sido impedidos de tener asilo político si los reclamaba Washington", dijeron líderes populares.
Por otra parte, cualquier proyecto alternativo a las resoluciones intervencionistas de Washington en "este periodo histórico puede ser considerado apoyo al terrorismo, como sucedió con abogados defensores de detenidos en Estados Unidos", dijo Adolfo Pérez Esquivel, premio Nobel de la Paz
Los diputados opositores a esta votación recordaron las graves "y abiertas violaciones a los derechos humanos en las guerras brutales que escenifica" Estados Unidos.
Miguel Bonasso, diputado del Partido de la Revolución Democrática, entregó a la prensa el discurso que no pudo pronunciar en la Cámara sobre el tema, donde fundamentaba su "enérgica oposición a los textos de las convenciones antiterroristas impuestas por Washington, que vulneran principios esenciales del derecho internacional".
Bonasso coincidió con otros diputados que rechazaron la votación "vergonzante" de la mayoría justicialista al recordar lo que sucede en Irak, Afganistán y Guantánamo, en la "imposición de un terrorismo de Estado mundial" por el gobierno de Bush y sus principales aliados, "que viola toda legislación internacional y humanitaria".