Mejor película y mejores actores, entre los reconocimientos que consiguió
Arrasó Temporada de patos con los Arieles; se adjudicó 11 galardones
Voces inocentes, sólo tres estatuillas
Ofelia Medina llevará el trofeo a los caracoles
Ampliar la imagen Ofelia Medina festeja su reconocimiento por mejor coactuaci�emenina. A la derecha, aspecto de la 47 entrega de los Arieles, en la que se observ� imagen del fot�fo Walter Reuter, fallecido la semana pasada FOTOS Marco Pel�
La Academia Mexicana de Artes y Ciencias Cinematográficas sucumbió ante la propuesta fílmica de Fernando Eimbcke y le otorgó 11 premios Arieles en la 47 entrega de los galardones, en las categorías de mejor dirección, película, ópera prima ficción, guión original y mejores actuaciones femenina (Danny Perea) y masculina (Enrique Arreola), entre otras.
La gran perdedora de la noche fue Voces inocentes, de Luis Mandoki, al conseguir sólo tres estatuillas de las 10 a las que estaba postulada: efectos especiales, maquillaje y coactuación femenina, premio que recayó en Ofelia Medina, quien en su discurso dijo que su Ariel "me lo voy a llevar a todos los caracoles zapatistas a enseñárselos a todos mis maestros para que se echen un taco de ojo con este indio encuerado que está buenísimo". En su equivalente de coactuación masculina el actor de extracción teatrera Carlos Cobos fue el elegido.
La ceremonia, realizada en el Palacio de Bellas Artes, fue opacada por la gran desorganización. Invitados y estrellas de cine se aglomeraron en el atrio del recinto de mármol, hasta las 8:15 de la noche no se les permitió pasar. Incluso hubo altercados entre el público y figuras públicas como Eugenio Derbez y Dalila Polanco, quienes ante la desorganización no sabían por dónde huir de las decenas de fanáticos que los perseguían y recibieron empellones y magullones. Tampoco a los representantes de los medios de comunicación se les permitió la entrada a la hora que los citaron y eso provocó altercados entre reporteros, fotógrafos y camarógrafos con los guardias de seguridad del recinto.
Las restantes categorías en las que Temporada de patos obtuvo Arieles fueron en diseño de arte, sonido, música compuesta para cine y mejor fotografía. Eimbcke no sabía donde guardar tanta felicidad y sólo alcanzó a decir: "Es maravilloso lo que ha pasado con esta película".
El premio al mejor largometraje documental recayó en manos de Felipe Cazals por su trabajo Digna... hasta el último aliento; el director no asistió a la premiación pero su productor Luis Kelly dijo al recibir el Ariel: "Es bonito saber que ésta película contribuyó a que se reabriera el caso del asesinato de Digna".
En la franja de ópera prima documental la cinta de Eugenio Polgovsky Trópico de cáncer fue la elegida. En cortometraje documental, el potente trabajo Soy, de Lucía Gajá, fue el ganador; Un viaje, de Gabriela Monroy, resultó elegido por la Academia como mejor cortometraje de ficción; como mejor cortometraje de animación el solvente cineasta Carlos Carrera se llevó la estatuilla plateada por su trabajo De raíz.
María Elena Velasco y sus hijos Iván e Iveth Lipkies obtuvieron el Ariel al mejor guión adaptado; el mejor vestuario fue para Junior Paulino y Lourdes del Valle por Adán y Eva todavía.
La ceremonia tuvo como hilo conductor el género cinematográfico del documental y la conducción corrió a cargo de Blanca Guerra, quien en diferentes momentos evocó la importancia del documental. Asimismo la presidenta de la Academia, Diana Bracho, en su discurso de apertura de la 47 entrega de los Arieles llamó a fortalecer el cine mexicano y a reflexionar sobre éste "protegerlo, porque es lo que nos sostiene como nación y es un espejo de complejidad que nos ayuda a conocernos mejor y nos representa con dignidad en el mundo".
Uno de los Arieles de oro fue para el cinedocumentalista Julio Pliego por su valiosa obra en este género; el encargado de darle la estatuilla dorada fue Manuel González Casanova, quien dijo: "La obra de Julio es invaluable, su registro ha permitido documentar con una mirada critica y progresista los más significativos acontecimientos sociales, políticos y culturales de México en los pasados 30 años". El otro fue para la actriz Carmen Montejo por trayectoria artística. La señora, con lágrimas en los ojos y flanqueada por María Rojo y Diana Bracho, dijo en su discurso de agradecimiento: "aquí estoy con mi Ariel de oro, no soy la abuelita del cine mexicano porque ésa es Sara García, yo soy sencillamente una actriz. Ya que no hay otra cosa, me voy a dormir con mi Ariel", lo que provocó una enorme ovación de pie del respetable.