Me gustaría que la gente apoye en el Azteca como lo hizo en el clásico, señaló

A Estados Unidos no lo veo tan fuerte como antes, dijo Márquez

Tiene muchos futbolistas en Europa pero sigue jugando a lo mismo, al contragolpe, criticó Borgetti

Héctor Altamirano dedicará el juego a los paisanos que viven en el vecino país

MARLENE SANTOS A.

Rafael Márquez, defensa del Barcelona de España, se integró ayer a la selección mexicana para alistar el partido del domingo frente a Estados Unidos, rival del que dijo: "no lo veo tan fuerte como antes".

Rafa es uno de los jugadores que salió peor librado en la Copa del Mundo Corea del Sur-Japón, cuando el equipo estadunidense eliminó a México y él fue expulsado y suspendido cuatro fechas.

Con su hablar lento y voz ronca, el jugador michoacano, quien se perfila al título de la liga española con el Barça, destacó que la tarea inmediata es cosechar tres puntos ante el equipo de las barras y las estrellas y luego una victoria más ante Panamá.

"Ya después podremos decir que tenemos medio boleto" rumbo a Alemania 2006, indicó.

Márquez consideró importante la asistencia del público en el estadio Azteca.

"Me gustaría que la gente apoyara como vi que lo hizo con sus equipos en el clásico América-Chivas hace una semana, y el domingo en el Pumas-Aguilas", puntualizó el jugador, quien reconoció tener clavada la espina de aquel partido ante EU, en el que Javier Aguirre dirigió al Tri.

Jared Borgetti fue otro elemento que tras la práctica matutina realizada en el Centro de Alto Rendimiento dejó traslucir su rencor hacia el plantel de Bruce Arena:

"Es un equipo que espera para buscar el contragolpe. Es rival incómodo porque la gente pide espectáculo y se nos dificulta complacerla ante quien viene a meterse atrás, claro que también es trabajo de uno abrir espacios."

-¿Entonces qué ha ganado Estados Unidos con tantos jugadores en Europa?

-No sé, pero al final termina jugando a lo mismo (contragolpe). Yo creo que si jugaran al tú por tú México sería mejor.

"De nosotros la gente espera mucho, porque estamos en un país donde el futbol es importante, pero si ellos pierden, allá ¡ni los pelan! Aquí debemos mostrar buen funcionamiento, nos lo exigimos nosotros mismos, el técnico y la gente."

Héctor Altamirano dedicó el juego "a los paisanos que radican en el vecino país del norte. Es gente que siempre nos apoya cuando jugamos allá y vive situaciones muy difíciles, un maltrato que no debería ser, pero que se da y ojalá pronto se pueda hacer algo.

"Y si con futbol podemos ayudarlos a atenuar las angustian que pasan, pues trataremos de que el domingo disfruten de una victoria."

El seleccionador Ricardo La Volpe optó por el borrón y cuenta nueva: "Yo vivo el presente, no sé lo que pasó en el Mundial ni me interesa".

En cambio recomendó ser inteligentes en la cancha porque se trata del rival a vencer "y seríamos estúpidos si salimos a jugar al choque".

Luego habló sobre las deficiencias en el trabajo en fuerzas básicas y hasta ofreció donar parte de su sueldo para pagar un buen estratega en ese sector.

El plantel quedó completo, aunque el defensa Hugo Sánchez tiene molestias en la rodilla y se le hará una resonancia magnética para saber si está en condiciones de jugar, mientras Cuauhtémoc Blanco no entrenó por cansancio. "Tratamos de recuperarlo con un trabajo por fuera", precisó La Volpe.