La senadora priísta censura que se intenten distorsionar las palabras de Cárdenas
Propone Sauri invertir en Pemex los ingresos extras por la venta de crudo
Los estados de la República dejarían de recibir fondos extraordinarios
La senadora priísta Dulce María Sauri Riancho manifestó ayer que un primer paso para fortalecer a Petróleos Mexicanos (Pemex) es "que todos los ingresos extraordinarios que se obtengan este año por la venta de crudo se destinen a Pemex y que no se distribuyan a los estados ni a la Federación".
La legisladora precisó que "si realmente se quiere resolver el problema de Pemex, un primer paso es que los ingresos extraordinarios que obtenga la paraestatal sean para que pueda hacer el trabajo de extracción y exploración en mejores condiciones, que pueda invertir en refinación, y eso se puede lograr con acuerdos de los legisladores".
Sauri Riancho fue entrevistada respecto a las palabras de Cuauhtémoc Cárdenas sobre la estrategia para modernizar Pemex. Sauri Riancho resaltó que "a mí me quedó muy claro lo que expresó el ingeniero Cárdenas, y coincido con el criterio de que se posibilite la inversión privada en la petroquímica, pero no así en la extracción de petróleo.
"Esto -permitir capitales privados y del extranjero en la extracción de petróleo- está fuera de cualquier duda, hubo algunos interesados en llevar agua a su molino, pretendieron entender otra cosa, buscar abonar sus terrenos, pero a mí me quedó muy clara la propuesta del ingeniero Cárdenas que era en la petroquímica, pues no habló de reforma constitucional."
La iniciativa privada vio con buenos ojos la "propuesta cardenista" de permitir inversión no estatal en Pemex, se le insistió a Sauri; "en ningún momento -respondió- el ingeniero Cárdenas habló de reforma constitucional, y lo que sucede es que esta discusión tiene un sustrato ideológico muy fuerte, y tal parece que el director de esta paraestatal no está muy orgulloso de lo que representa Pemex para los mexicanos, y en forma machacona insiste en caracterizar a esta empresa como que está quebrada, y es obvio que hubo la intención poco sana de tergiversar la propuesta cardenista".
Más adelante la senadora priísta subrayó: "tengo una propuesta muy concreta, un primer paso es que Pemex se quede con todos los recursos adicionales que obtenga por la venta de petróleo. El año pasado fueron 14 mil millones de dólares; lo que se gane este año debe destinarse a que la paraestatal pueda trabajar en mejores condiciones".
-¿No generaría esta propuesta conflicto con los estados?
-No hay razón para que existan conflictos, porque a los estados les están garantizados sus ingresos con el precio del barril del petróleo a 27 dólares, ni a las entidades ni al gobierno federal se les quitará nada. Si se quiere fortalecer a Pemex se le deben dejar esos recursos adicionales.
-¿Esto tendrá que ser producto de un acuerdo legislativo?
-Desde luego, tendrá que ser un acuerdo de los diputados de todos los partidos políticos. Yo siempre me he preguntado por qué si todos los legisladores, incluyendo a los del partido en el gobierno, dicen que hay que fortalecer a Pemex, por qué no le han dejado los recursos adicionales para que pueda trabajar.
La senadora insistió: "el año pasado fueron 14 mil millones de dólares, que se obtuvieron por ingresos extraordinarios, y a la paraestatal casi no le tocó nada o muy poco; por qué -se preguntó- no se tomaron de esos 6 mil millones de dólares para que Pemex invirtiera en la explotación de la cuenca de Burgos en gas natural", y volvió a cuestionar al Estado: "¿es el verdadero interés fortalecer a Pemex?, si esto es cierto se tienen todas las herramientas para hacerlo, pero si el verdadero interés es propiciar la inversión privada se entiende el permanente cuestionamiento de que Pemex como empresa está quebrada, esto es algo muy lejos de la verdad".
En otro tema, la senadora Sauri se refirió también a las protestas de ciudadanos en Tijuana por la instalación de las empresas regasificadoras Chevron-Texaco y Sempra-Shell. Destacó que no son incomprensibles las razones por las cuales empresas trasnacionales que van a servir al estado de California, en Estados Unidos, instalan sus plantas del lado mexicano. La causa es muy sencilla: "se debe a que la legislación ambiental en California es muy estricta con la protección del medio ambiente y en el caso mexicano parece que no lo es tanto. Me pregunto: ¿dónde están las autoridades mexicanas?", concluyó.