Somos millones de hombres y mujeres,
Luis Macas
En nuestras comunidades existimos en colectividad. Vamos a poner en práctica el liderazgo colectivo que se opone al caudillismo del sistema político. Vamos a rescatar los valores y principios de nuestros pueblos, ese mundo comunitario vamos a ponerlo en práctica para compartirlo con el pueblo ecuatoriano. Vamos a poner en alto los principios de la redistribución, a ejercer nuestro cargo con el principio de reciprocidad, de complementariedad, frente a la competitividad que nos está matando a todos.
En este momento de crisis hay que valorar y poner en vigencia nuestros principios, rescatar nuestra institucionalidad propia, porque la otra --la que fabricaron para mezquinamente defender los intereses de la clase dominante-- ya está agotada.
Construyamos nuestros conocimientos y saberes, hermanos y hermanas de las distintas nacionalidades y pueblos, construyamos nuestros paradigmas propios en este continente y en estas tierras [...] Paradigmas alternativos que van a ser buenos no sólo para los pueblos indígenas sino para toda la sociedad. Hagamos de la resistencia política, cultural y epistémica una protesta y una realidad de vida en armonía con nuestra madre naturaleza [...]
Vivimos a diario una estructura, un poder, una institucionalidad excluyente y hegemónica [...] Tenemos que sentarnos a conversar todo el pueblo ecuatoriano para construir un poder alternativo y distinto desde abajo hacia arriba, no como el que nos quieren hacer, tirándonos con anzuelo de arriba hacia abajo [...]
El poder está en la comuna, está abajo, no está arriba, no nos embriaguemos, el poder lo estamos construyendo con esta gran unidad. El poder no está hecho, el que nos construyeron está chorreando, podrido. Para darnos cuenta, bastan los sainetes que en estos días nos dan los señores representantes de la patria. Los oligarcas se están peleando porque no se han repartido bien esa institucionalidad eclipsada, agotada. El pueblo ecuatoriano, nuestros hijos, esperan algo nuevo y lo esperan de nosotros [...] No nos equivoquemos, ¿cuál mismo es el gobierno? El gobierno de las nacionalidades y pueblos está aquí y vamos a luchar y a hacer todo lo posible para que esta patria, estas tierras sagradas, sean de los ecuatorianos, sean de nuestros pueblos [...]
Estamos dispuestos a pelear junto a las nacionalidades indígenas de la amazonía ecuatoriana, por que ahí las transnacionales petroleras no puedan vulnerar nuestro hábitat, nuestra vida, nuestros recursos naturales que deben ser patrimonio de los ecuatorianos y de todo el mundo [...] Defenderemos a capa y espada los recursos naturales, nuestra biodiversidad, lo más grande que tenemos [...] No dejaremos que destruyan nuestra madre naturaleza.
Mil disculpas compañero jefe de bloque del Pachakutik en el Congreso, pero creo que la responsabilidad está fundamentalmente en nosotros. Ya estamos dejando totalmente de creer en la institucionalidad. Nuestras luchas, nuestras acciones, están siempre donde nos han puesto históricamente nuestros antepasados. Estaremos donde debemos estar. Hemos incluso tenido que mandar a la casa a los gobiernos corruptos y sinvergüenzas, ladrones de este país [...]
La democracia en este país se compondrá, será una democracia sin hambre, sin miseria, sin analfabetos, sin injusticia. Cuando sea necesario hay que tumbar gobiernos, y no temamos compañeros. Lo vamos a hacer cuantas veces sea necesario, hasta que se instaure la verdadera democracia en este país, porque no nos pueden tener engañados [...] ¡Carajo! ¡No nos vamos a dejar pisar el poncho! Tenemos que rescatar los espacios conseguidos por el movimiento indígena y les advertimos a los contrarios que se cuiden, y que deben el respeto más grande, porque en 512 años en este país hemos sido respetuosos, y desde esa diversidad y esa pluralidad queremos construir nuestra autonomía, pero estas autonomías hoy están usurpadas e intervenidas por Lucio Gutiérrez, sirviente de la oligarquía y mayordomo del imperialismo.
Allí están sus secuaces, allí está la política nefasta de su gobierno, dividiendo a nuestros pueblos y nacionalidades. Esas platas que tenían que irse a nuestras comunidades, nuestras escuelas, maestros, oficinas provinciales, las están llevando a Antonio Vargas estos "filipillos" sinvergüenzas, que lucran en este momento. No les va a durar mucho tiempo. A éstos vamos a combatir, no vamos a quedarnos así. Vamos a rescatar lo que es nuestro, lo que nos pertenece [...]
Recuperemos nuestras tierras. El problema agrario está solucionado, dicen algunos. El 63% de las tierras está en manos de un 10% de la población, está reconcentrada en las manos de los gamonales del país.
Vamos a luchar por la tierra, donde podamos seguir resistiendo y desarrollando la continuidad histórica de nuestros pueblos y nacionalidades. Vamos a trabajar con los comités y con las juntas de aguas, hacer organización para defender este recurso estratégico que también quieren llevarse. Si fuera posible lo hubieran metido en el bolsillo, pero como es agua no pueden, están por privatizarlo.
No nos dejemos engañar, hay que defenderlo a como dé lugar, porque sin agua no podemos vivir, no podemos producir. Levantémonos los pequeños y medianos agricultores. El 75% de los alimentos de primera necesidad ponen ustedes los pequeños y medianos agricultores. Las grandotas haciendas, lo que ellos llaman la agro industria, venden afuera. No sé si el dinero llega a las arcas del Estado o se queda en sus bolsillos pero ¿quién da de comer a este pueblo? Los pequeños y medianos agricultores. Hay muchas iniciativas, muchas experiencias en el país, juntémonos y vamos a salir adelante.
Es necesario establecer alianzas estratégicas con nuestro pueblo, con los sectores populares, sociales, progresistas y patrióticos de nuestro país. Invitamos a todos los sectores y actores de nuestra sociedad, pero fundamentalmente a los que nos entendemos en el diálogo, a los que nos identificamos en objetivos y propuestas. Llamémonos, convoquémonos, para construir un Estado nuevo, distinto, plurinacional. Construyamos el sueño de nuestros viejos, la sociedad intercultural de nuestro país.
El movimiento indígena siempre ha tenido una posición histórica que es de confrontación, de critica y cuestionamiento a este sistema, a este Estado. Los queremos invitar a dar los elementos fundamentales, para que --en el corto plazo--, tengamos una propuesta para el pueblo ecuatoriano, una agenda completa de los sectores populares de nuestro país. No es posible que estemos tan divididos, que cada quien tengamos propuestas y queramos salvar este país separadamente [...]
Levantémonos, alcemos nuestra voz y marchemos juntos, por que el tlc no pase. Si no, el señor Bush pensará que en este patio trasero del norte habrá mercado libre o pensará que va a hacer (con las botas sangrientas de Afganistán e Irak) lo mismo en este continente. Pensará que geopolíticamente puede manejar a control remoto todo cuanto quiere el imperio. La intención es convertir a este continente maravilloso y sagrado en el basurero del norte, y eso no lo vamos a permitir.
Queremos decirle al gobierno actual [...] que aquí estamos de pie, a viva voz diciendo que el pueblo ecuatoriano se levante, junto a este gobierno de las nacionalidades indígenas, porque él no nos representa.
¡Aquí estamos! Hago memoria de una frase
de San Martín: "es la hora del recuento y de la marcha unida y hemos
de andar en cuadro apretado como la plata en las raíces de los Andes".
Así queremos estar, en marcha, juntos, con el shungo, con el pensamiento,
con las manos. La voz de nuestro padre Tupac Amaru: "Nos quieren arrancar,
y no nos podrán arrancar. Nos quieren matar y no podrán matarnos:
un día volveré...", y volví y aquí estoy, ¡aquí
estamos! Somos millones de hombres y mujeres ¡carajo! y nadie nos
pisoteará..
Versión editada y fragmentaria del discurso de
Luis Macas,
nuevo presidente de la Confederación de Nacionalidades
Indígenas del Ecuador (Conaie),
Quito, 14 de enero del 2005.