A LA MITAD DEL FORO
Idus de marzo y los negocios de Grupo Carlyle
LA PRIMAVERA SE adelantó al natalicio de Juárez. Y el día 18 llegaron los idus de marzo. La inversión privada y mixta no altera la rectoría soberana ni la propiedad estatal de la empresa nacionalizada. No es que insista Vicente Fox, hoy, hoy, hoy. Ni modo, lo dice Cuauhtémoc Cárdenas. Es hora de encender los faroles porque llega la oscura noche de la derecha extrema. Y los negocios del señor Julio César no producen rentas a la nación.
SE ADELANTO LA sucesión presidencial. Ya no hay tapados. Se quitaron las caretas los que encapucharon a Juárez. La ultraderecha empuña los fascios del sinarquismo silvestre y santurrón. "Son meones de agua bendita", dijo el adelantado de Felipillo santo, el que lanzó la alarma y aseguró que amenazaba al PAN la derechización. Se quedó corto el diputado Germán Martínez. Carlos Medina Plascencia, triste, lloroso y resignado, volvió al Cerro del Cubilete. Bajó del monte Manuel Espino, el ultraderecho escudero de la señora Marta; el valiente de la baraja de lotería que se alzó con el santo y la limosna. Ya no hay tapados. Luis Felipe Bravo Mena reza un novenario y Manuel Espino canta loas a la victoriosa gestión del hombre blanco y barbado que perdió 50 diputados federales de un solo golpe en las elecciones intermedias.
"EN UN LUGAR peor que Los Pinos" se decidió que Espino asumiera el mando panista, dijo Tatiana Clouthier. La renuncia de la hija de Maquío no es desbandada, dicen los "verticales": es relevo generacional. Matusalem sería dirigente juvenil en el partido de la ultraderecha que no gobernaba desde que triunfó la revolución de Ayutla. Juárez no debió de morir. Se adelantó el equinoccio y la desmesura tropical anuncia el combate entre Roberto Madrazo y Andrés Manuel López Obrador por el legado del oaxaqueño universal. Madrazo ha dicho que volverá a Los Pinos con un retrato de Juárez bajo el brazo. Andrés Manuel dice que es suya la sobriedad del que convocaba a los servidores públicos a no acumular fortunas y resignarse a vivir en la honrada medianía.
EL RUIDO DESDE la atalaya, los miedos de los dueños del dinero hallaron eco en The New York Times. Santiago Creel dice que no dijo lo que dicen que dijo. Pero que camina como pato, vuela como pato y, ni hablar, es populista. Andrés Manuel López Obrador se curó en salud: se reunió con gerentes y dirigentes de empresas trasnacionales para decirles que él únicamente propone acomodar las calabazas camino del mercado. Que hay empresarios buenos y malos. Ricos que pueden pasar por el hoyo de una aguja, siempre y cuando no hayan pasado por el salinismo win-win, bajo la mirada del innombrable, bajo los arcos triunfales de la modernización que acabó en regresión: umbral para la alternancia y para la asunción de la ultraderecha que venía de la mano del Macabeo abajeño. Vade retro. Salinas es el chupacabras.
PERO HAY CUPULA de cúpulas, sancta sanctorum de los señores del dinero que financian los negocios del señor Julio César. El Consejo Ejecutivo de Empresas Globales, secuela señera del Consejo Mexicano de Hombres de Negocios y otras juntas de notables que quitan y ponen, se reunió con el estratega de Nacajuca: Wal-Mart, Microsoft, Hewlett Packard, IBM, Siemens, Daimler Chrysler, Exxon Mobil, Banamex-Citigroup, Nestlé, Sabritas. Bristol Myers Squibb, Metlife México y "el triángulo de hierro": el Grupo Carlyle de George Bush padre, del vicepresidente Cheney y socios en la aventura de comprar empresas y hacerlas crecer en el ánimo del Pentágono; supervisores en la imperial y civilizadora tarea del "nation building", evangelizar y democratizar para que reine la verdad única en el nuevo orden global: los iraquíes ya pueden elegir libremente, dijo Aznar en Monterrey.
LO QUE VE el que vive. Luis Téllez, alumno distinguido y colaborador de Pedro Aspe, funcionario de alto rango y confiabilidad con Carlos Salinas, secretario de Energía de Ernesto Zedillo, es hoy el representante, el encargado de los negocios de Grupo Carlyle. Entre Domingo de Ramos y el grito de Barrabás de los que claman por el no al desafuero, López Obrador dijo a Luis Téllez: "Me alegra que estemos de acuerdo en un tema tan importante". El gestor y coautor de la iniciativa zedillista de reforma energética, importador del proyecto británico de sumaria privatización, hoy representante de Carlyle, preguntó al candidato en jaque si estaría dispuesto a abrir Pemex y la CFE a la competencia... sin privatizarlos. Y López Obrador manifestó su beneplácito por la coincidencia.
MITO GENIAL. O turbia confusión, como en las cabezas de las crónicas periodísticas del aniversario de la expropiación del petróleo: Fox y la urgencia de invertir; subrayar que Pemex es la empresa petrolera más endeudada del mundo; pasmo en itálicas para reproducir lo dicho por Carlos Romero Deschamps, el llamado a eludir trampas y provocaciones para lograr un acuerdo que permita emprender la reforma del sector "con discreción y audacia". Sin chocar, sin arremetidas, dijo el líder del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana. Y sin desmemoria, sin desestimar el vigor con el que defendió la propiedad estatal Ricardo Aldana en la asamblea del PRI, el dominio soberano de los veneros de petróleo, del gas, de los hidrocarburos que hay en nuestro subsuelo. (Ni modo, ni manera, aunque algún corrector cambie el llano "'dijo" Pánfilo Natera"' por algún palmetazo de dómine.)
CABEZAS Y BALAZOS. PERO en el sonido y la furia de la crispación política, nadie atiende al cómo y el porqué de ese endeudamiento, ni a la factibilidad de cambiar el régimen fiscal y otorgar autonomía de gestión a Pemex. Luis Ramírez Corzo dijo que Petróleos Mexicanos está enormemente endeudado; el pasivo total asciende a 960 mil millones de pesos. Alarma por las cifras en rojo. Pero en tono menor se transcribe que el director general de Pemex señaló que las contribuciones fiscales de la empresa, su aportación al gasto público, han representado durante los pasados cuatro años 75 por ciento de sus ingresos totales y 110 por ciento de utilidades antes de impuestos. Ordeñar a mañana, tarde y noche. Y lo que el presupuesto de egresos destina a Pemex se ha reducido sistemáticamente: el techo fiscal es tapanco para la inversión y babélica torre para eludir el impuesto progresivo sobre la renta.
ISR SIN MIEDO a los de arriba, sin el timorato argumento de que incrementarlo a los de mayores ingresos, o peor todavía, globalizarlo para que el impuesto resulte de la suma total de ingresos y no excluya herencias y legados ni jugosas ganancias de la especulación. Esta sí, a corto plazo. Pero esa es otra reforma. De las que han dado en llamar "estructurales" mientras desmantelan las estructuras institucionales del poder constituido. Esos son otros López, dirán quienes siguen las pancartas del no al desafuero con la tenacidad y alegría de quienes siguieron al flautista de Hammelin. Efectivamente, pero habló el hijo de la esfinge de Jiquilpan. ¿Quién dijo que el cambio era prerrogativa de la derecha que festejó la victoria cultural y festinó la muerte de las ideologías?
REFORMA Y REVOLUCION, "SOBRE los hombros de gigantes", erigieron nación y Estado mexicanos. Transformación, cambio, proceso en la dualidad contrapuesta de partidos que, decía Luis Cabrera, ha sido la única en la historia del hombre: el del progreso y el conservador. Avance o retroceso; reforma y revolución o permanencia y reacción. Después de la caída, antes, desde la instauración del Reagan-thatcherismo que convocaba a glorificar a quienes habían puesto a la extrema derecha en la corriente principal del pensamiento universal, el movimiento retrógrada expropió la democracia para marginar la república y disolver a las izquierdas que aceptaron el juego de espejos para abandonar discurso y objetivos igualitarios en favor de la democracia sin adjetivos y el imperio de la mano invisible del mercado.
CUAUHTEMOC CARDENAS NO habló de privatizar, de ceder ante las fuerzas del capital que fluye libre de regulación alguna y renunciar al dominio soberano del petróleo que es mucho más que un insumo. Habló de no renunciar al derecho y obligación de participar en el cambio impuesto por el cambio mismo; a no paralizar la acción del progreso a nombre de una fidelidad inamovible a la letra de la ley. Hay un poder constituyente. La izquierda, los mexicanos del partido del progreso, no podemos marginarnos, permanecer estáticos mientras la derecha y la ultraderecha expropian el cambio y se pronuncian en favor de un reformismo que, lo sabe el pensamiento de la razón, lo saben los de la pobreza extrema, es retórica sucedánea de fueros y privilegios, de la permanencia del antiguo régimen y sustitución de los dogmas descartados al resolverse la guerra fría, por los de la nueva ortodoxia económica.
NEOLIBERAL, SI LO quiere la orfandad de ideas. La que dicta el estado de excepción y condena a millones a la marginación de la pobreza que se multiplica a sí misma. Estado de sitio impuesto "para combatir al terrorismo". Estado de sitio voluntario "para defender la seguridad nacional" del imperio que tutela la del resto de las naciones.
CUAUHTEMOC CARDENAS PROPUSO nuevo régimen fiscal y autonomía de gestión para Pemex. Y ante la terca realidad, la necesidad de financiar a la empresa sin limitarnos a explorar y extraer crudo, no como auxiliar de la renta pública, sino sostén fundamental del fisco. Habló de analizar y valorar posibles alianzas con otras entidades y fortalecer la participación del capital privado. "En el marco legal vigente, no sé por qué no lo quieren ver, dijo, hay oportunidad para todo tipo de inversiones. De hecho ya se están dando. Hay que facilitarlas para tener mayores inversiones donde puedan ser partícipes de la petroquímica o de la refinación; en algunos casos inversiones mixtas, en otros privadas y en otros públicas".
SE ADELANTO EL equinoccio. No han pasado los idus de marzo y los negocios del señor Julio César no son los de la nación. Pero es imposible poner sordina a la escueta palabra de Cuauhtémoc Cárdenas. Camarón que se duerme acaba formado con los cangrejos al compás que marchan hacia atrás.
LAS ENCUESTAS NO van a resolver la elección presidencial de 2006. El que no se defina y quiera navegar entre dos aguas se va a ahogar en la orilla. ¿Quién dijo que el cambio era privilegio de la ultraderecha?